Un padre y su hijo, condenados por las manifestaciones antigubernamentales del 11 y 12 de julio de 2021, denunciaron desde la prisión de máxima seguridad Combinado del Este, en La Habana, la difícil situación en que se encuentran.
“Nos maltratan aquí como locos”, dijo José Luis Castillo de la Torre, de 58 años, sancionado a 11 años de privación de libertad.
Él y su hijo, José Luis Castillo Bolaños, de 32 años de edad, quien cumple condena de 10 años, estuvieron en las protestas de La Güinera, en Arroyo Naranjo, y fueron condenados por el delito de sedición.
En una llamada telefónica, a la que Martí Noticias tuvo acceso por cortesía del Centro de Relatores de Derechos Humanos, explicaron que como reclusos tienen todos los derechos negados.
“Somos los de La Güinera y nos negaron la mínima, por gusto”, aseguró Castillo Bolaños, quien ejercía como tatuador antes de ser detenido.
“Aquí no han atención médica, soy asmático y nunca me han dado ni un sala’o aerosol; soy diabético al igual que mi papá, no tenemos ayuda. Mi mamá falleció en el 2022. No tienen ni cómo justificar las