El robo de 1.660 cajas de pollo, unas 133 toneladas, de la Empresa Comercializadora de Alimentos COPMAR, en La Habana, afectó la entrega del producto por la libreta de racionamiento en al menos una provincia del país, informaron las autoridades.
En un reportaje transmitido este sábado por la televisión estatal, en el que no se especifica la fecha exacta en que se cometió el delito, miembros del equipo de investigación del Departamento Técnico de Investigaciones del Ministerio del Interior explican cómo sucedió el robo, en el que estarían implicadas unas 30 personas.
En los frigoríficos de COPMAR, grupo empresarial pesquero del Ministerio de la Industria Alimentaria, se guardan los productos de importación que requieren refrigeración, para su posterior distribución. Las imágenes muestran el almacenaje en el lugar de cajas de pollo Tyson, de la cadena estadounidense Tyson Foods.
La cantidad de pollo sustraída equivale a la entrega por la canasta básica de distribución de alimentos, en las cantidades actuales, a “una provincia mediana”, dijo el director general de esa empresa, Rigoberto Mustelier.
Según detallaron los investigadores, los ladrones sustituían los sellos originales de los frigoríficos por otros previamente falsificados con los mismos números, información que obtenían con la complicidad de trabajadores de la COPMAR, lo que impedía detectar la