José Manzaneda. Foto: Cuba en Resumen.
Mi primer “encuentro” con José Manzaneda, si cabe esta palabra, fue cuando estrené en Tele K, una televisora sin ánimo de lucro radicada en Madrid, el programa La cámara lúcida, espacio dedicado a promover el cine documental Iberoamericano.
Lo llamé para que viniera al estudio —él reside en Bilbao— pero por razones de agenda declinó la invitación. En su lugar, estuvo el coordinador del Observatorio de Multinacionales en América Latina, una de las ONGs que financió su filme El segundo desembarco. Multinacionales españolas en América Latina. Con este documental se dio el pistoletazo a un espacio que fundé y dirigí, por más de un año, donde presenté más de sesenta piezas cinematográficas. El proyecto fue truncado tiempo después por la lideresa de la Comunidad de Madrid en aquel entonces, Esperanza Aguirre, quien logró cerrar la televisora con una escalada de multas contra la empresa que ponía en el aire la señal de Tele K.
Manzaneda y yo nos vimos un tiempo después en Alcalá de Henares. En esa localidad de Madrid se desarrolló un amplio encuentro de la Plataforma de la solidaridad con Cuba en España. Fue la oportunidad de conocernos y establecer una relación que hasta hoy, es de hermandad, de diálogos permanentes, de absoluto respeto, sustentado en los sueños que nos unen, la existencia Revolución cubana.
El medio Cubainformación, del que soy un activo colaborador, y José Manzaneda, su coordinador, son dos de los protagonistas más descollantes del vasto movimiento de la solidaridad con Cuba en España. Esta publicación materializa un periodismo crítico de empaque intelectual, de aguda escritura y certeros abordajes sobre la manipulación que se gesta desde los sectores reaccionarios contra el proyecto socialista de Cuba.
Su permanencia está amenazada por las embestidas de la organización Prisoners Defenders, asentada en Madrid, que opera al servicio de la política del gobierno de los Estados Unidos. Este grupo reaccionario ha interpuesto ante los tribunales de Madrid “una querella criminal por injurias, calumnias y delito de odio, presentada por el presidente de la organización ‘anticastrista’ Prisoners Defenders, que solicita una condena de seis años de cárcel y una indemnización de 50 mil euros, por el contenido del reportaje “Crear una crisis sanitaria en Cuba: objetivo de la guerra contra su cooperación médica”.
Sobre este nuevo capítulo que apuesta por truncar la erguida voz de la solidaridad con Cuba en España, hablé con José Manzaneda, quien revela algunos tópicos y reflexiones de otro intento por anular el discurso y los principios de la solidaridad internacional a favor de nuestra nación.
¿Qué posición tiene Euskadi-Cuba —si cabe hacerte la pregunta— ante esta demanda?
–La posición de la Asociación Euskadi-Cuba es exactamente igual que la de Cubainformación; además, compartimos el mismo abogado. Esta asociación fue la creadora de dicho medio, aunque hoy en día está apoyado y sostenido por decenas de organizaciones que colaboran con sus materiales y también con su poco dinero para el sostenimiento de Cubainformación. La posición es, por supuesto, de que hay que mantener la verdad de Cuba, la dignidad del periodismo crítico, la dignidad de la cooperación al desarrollo en Cuba y la dignidad del movimiento de solidaridad con Cuba frente a personas y organizaciones que tienen mucho poder, pero, finalmente, se impondrá la justicia.
¿Truncar la obra solidaria que desarrolla Euskadi-Cuba por el pueblo cubano que sufre un bloqueo económico, comercial y financiero, resulta un objetivo velado de la parte demandante?
–La querella ataca a la Asociación Euskadi-Cuba porque la Asociación Euskadi-Cuba tiene más de treinta y cinco años de trabajo en el campo de la cooperación al desarrollo, por ejemplo, con decenas de proyectos que han beneficiado y benefician a comunidades campesinas, a cooperativas, etcétera. Indudablemente es una organización que tiene un local al que se podría embargar en caso de prosperar este disparate de juicio o de querella; estamos hablando de que es un disparo a la propia acción de cooperación al desarrollo, que mejora las condiciones de vida de personas o familias en Cuba.
“Ellos apoyarán todo lo que sea cortar ingresos de cualquier tipo a Cuba, sea a través de la cooperación médica, sea a través de la inversión del turismo, o en este caso de la cooperación al