El grupo terrorista Estado Islámico (EI) se adjudicó este jueves la autoría del atentado que provocó la muerte de unas 84 personas en la localidad de Kerman, en el sur de Irán, mientras se celebraba el cuarto aniversario del asesinato del comandante iraní Qasem Soleimaní.
Citado por EFE, el EI comunicó que dos de sus miembros “se dirigieron hacia una gran concentración” cerca de la tumba de Soleimaní e “hicieron detonar sus cinturones explosivos”, acto que dejó también un saldo superior a los 200 heridos.
El grupo terrorista identificó a los atacantes suicidas como Omar al Mowhid y Saifalá al Muyahid, quienes cometieron el atentado para que “los politeístas sepan que los yihadistas están detrás suyo y de sus proyectos”.
Una fuente “bien informada”, según la agencia iraní IRNA, señala que “el atacante suicida del primer incidente era un hombre que quedó completamente desmembrado como resultado de la explosión”, mientras que la segunda deflagración también “podría tratarse” de una acción similar.
Los medios locales informaron que la primera explosión ocurrió a las 14:50 hora local, a unos 700 metros del cementerio Jardín de los Mártires, alrede