MIAMI, Estados Unidos. — La trovadora, cantautora y compositora cubana Teresita Fernández García dejó una huella indeleble en el panorama musical y cultural de Cuba y Latinoamérica.
Nacida el 20 de diciembre de 1930 en Santa Clara, Villa Clara, Cuba, su vida y obra han sido una inspiración para varias generaciones.
Con una formación autodidacta, Teresita inició su carrera musical a una edad temprana, cantando desde los cuatro años en la emisora radial CMHI de Santa Clara, bajo la dirección de su madre, Amparo García, en el programa Hora Martha. Su talento excepcional la llevó a graduarse como maestra normalista y obtener un Doctorado en Pedagogía en 1959.
Sus composiciones, que fusionan sonoridades de antiguas baladas y folclore campesino, la han posicionado como una de las figuras más destacadas en el ámbito de la canción para niños en Latinoamérica. Teresita completó un triángulo de grandes maestros junto al mexicano Francisco Gabilondo Soler y la argentina María Elena Walsh.
En la década de los sesenta, su popularidad alcanzó nuevas alturas, gracias a sus presen