AREQUIPA.-Tras su inauguración el 4 de septiembre de 1944, el obelisco y la plaza circundante de Marianao se convirtieron en los lugares más representativos y simbólicos del municipio.
Sobre el origen y el nombre del monumento, han persistido varios errores a lo largo del tiempo. Algunos sostenían que fue erigido para rendir homenaje al científico cubano Carlos J. Finlay debido a su parecido con una jeringuilla. La noción es equivocada, pero todavía en el imaginario popular de hoy pulula esa conjetura.
En realidad, estas estructuras fueron erigidas durante el periodo constitucional del presidente Fulgencio Batista con el propósito de conmemorar el golpe de Estado que él, siendo sargento, protagonizó el 4 de septiembre de 1933, justo once antes. La construcción fue planeada para ejecutarse frente a la entrada principal del campamento de Columbia.
El ingeniero arquitecto José Pérez Benitoa, a través de la monumental plaza elipsoidal, embelle