Este jueves se votó en la Asamblea General de Naciones Unidas una nueva resolución contra el bloqueo. Nuestro podcast, que se trasmite originalmente en horas muy tempranas del día, recordó cómo había sido la votación hace un año y coincidimos en que este 2 de noviembre sería muy similar. “Seguro seguro, habrá dos votos en contra” adelantó Reinier Duardo: Estados Unidos, por supuesto y su cómplice Israel. Así ha sido y así será, mientras ambos gobiernos actúen como cómplices de sus respectivas fechorías.
En las últimas horas varios países se pronunciaron sobre el tema. Uno, como cubano, conoce qué es el bloqueo y lo que significa sufrirlo por más de seis décadas, pero escuchar palabras de condena al cerco en labios que hablan otras lenguas, de representantes de países que están geográficamente lejanos, política y culturalmente distantes, es muy inspirador.
Es lo que sentimos al escuchar, por ejemplo, a la representante de El Salvador, rechazando la inclusión de Cuba en la lista de supuestos patrocinadores del terrorismo con una sencilla frase: “lo único que hemos recibido de Cuba siempre ha sido generosidad y solidaridad”. Lo mismo que dijeron, con otras palabras, los representantes de cuantos argumentaron su voto este año.
Mucho antes de que sucediera, todos sabíamos que iba a repetirse una votación similar sino exacta a la de 2022. Israel ha votado siempre junto a Estados Unidos y no hará otra cosa, menos hoy que nunca antes, porque la impunidad con la que