MIAMI, Estados Unidos. — La leche en polvo es uno de los productos que escasean en Cuba desde hace muchos años. Según funcionarios del régimen, solo es posible garantizar la demanda nacional importando el producto en altos volúmenes, algo imposible debido a sus altos precios en el mercado internacional.
Manuel Sobrino Martínez, ministro de la Industria Alimentaria, explicó en el espacio Mesa Redonda que la tonelada de leche en polvo “ha tenido un incremento de 1.358 dólares respecto a 2019” y que, por tal motivo, “solo se ha podido adquirir el 21 % de lo previsto”.
“Estamos hablando de que, para garantizar su estabilidad en los diferentes destinos dentro del país, hay que obtenerla con casi 90 días de antelación, de ahí las tensiones que hemos estado enfrentando, distribuyendo con periodos cortos e incluso con determinados baches en el abastecimiento de la que se necesita para los niños”, dijo Sobrino.
El declive de la producción de alimentos, marcado por las fallidas políticas económicas, ha obligado al régimen cubano a importar casi todo lo que se consume en la Isla.
“Los precios de los alimentos en el mercado internacional han mostrado un aumento considerable, lo que hace casi imposible su co