Este producto periodístico forma parte de la cobertura especial Nuevos actores económicos y desarrollo local en Cuba (2023-2025). #DesarrolloLocalParaCrecer |
La Habana, 20 oct.- Mediante talleres presenciales y en línea, una tienda de juguetes didácticos, su sección editorial y espacios de intercambio, el emprendimiento y proyecto pedagógico El Mundo de Amalia estimula la educación emocional infantil y de las familias.Con una sede en el municipio Playa, de La Habana, y presencia en varias plataformas digitales, esta iniciativa tiene el objetivo de formar a niñas y niños independientes, felices y equilibrados emocionalmente, con la capacidad de identificar sus sentimientos y expresarlos de forma auténtica y adecuada.
Para lograrlo, los intercambios, las asesorías y los talleres incluyen también a madres, padres y cualquier persona adulta responsable o no de menores de edad, de forma tal que propicien la crianza en un entorno seguro, respetuoso y libre de violencias.
El peldaño
“Te digo como empezó y es un disparate, pero la vida se trata de coger esos disparates y ponerlos a funcionar”, comentó Ana Mahé Inda sobre la génesis de su proyecto.
En 2019, ella lideraba la iniciativa Habana es nombre de mujer, enfocada a la imagen publicitaria y la fotografía, y en la que se visibilizaban emprendimientos dirigidos por mujeres. Tras intercambiar con más de 20 negocios, la cerró debido al auge de la covid, pero mantuvo los contactos vía digital.
Una mujer de la ciudad de Cárdenas, en la occidental provincia de Matanzas, le pidió ayuda para vender unos juguetes. Cuando ya estaban vendidos y en lista de espera las entregas, la urbe “cerró” por la pandemia. Para explicar esta situación, Inda creó un grupo de WhatsApp con sus clientes, madres en su mayoría.
Y ese grupo, en el que terminaron conversando sobre muchas cosas, no solo le sirvió a ella para saber la demanda de juguetes existente, sino también para comprender los cientos de inquietudes e inseguridades de las madres cubanas. “Me llevó a entender que yo no era la única ‘perdida’” (en cuestiones de crianza), reconoció.
Poco después, decidió cursar en 2020 y en línea, un Máster en Educación Emocional y en Neurociencias Aplicadas, organizado por la Fundación Liderazgo Chile (Flich), muy diferente a su anterior Máster en Administración de Negocios, por la Universidad de La Habana. A finales de ese mismo año, puso en marcha El Mundo de Amalia.
“La educación emocional te enseña que puedas convertir cualquier hecho en un peldaño de tu vida”, afirmó la emprendedora. “Yo convertí a Amalia en un peldaño, porque mira todo lo que creó”, dijo.