La congresista cubanoamericana María Elvira Salazar expresó su opinión en Twitter ayer viernes 1 de julio, a raíz de la muerte del general Luis Alberto Rodríguez López-Calleja, máximo jefe del conglomerado militar GAESA, y cerebro principal del manejo de las finanzas del régimen. A juicio de la legisladora republicana el fallecimiento de este hombre es una gran pérdida para la estructura de poder de la dictadura.
«El castrismo pierde un hombre clave en su brutal maquinaria. El general López-Calleja estaba en el negocio del poder y se enriquecía al frente de la empresa militar. Estos sátrapas no son inmortales», aseveró.
«¡Que Dios tenga compasión de él, porque el pueblo cubano no la tendrá!», puntualizó.
El castrismo pierde un hombre clave en su brutal maquinaria. El general López-Calleja estaba en el negocio del poder y se enriquecía al frente de la empresa militar.
Estos sátrapas no son inmortales. ¡Que Dios tenga compasión de él, porque el pueblo cubano no la tendrá!— María Elvira Salazar (@MaElviraSalazar) July 1, 2022
Mientras los simpatizantes del régimen han lamentado la muerte del llamado «zar de la economía» de la Isla comunista, gran parte de la oposición ve en este suceso una oportunidad de oro para que se conquiste un cambio político real en Cuba.
Según el economista Emilio Morales, presidente de la consultora Havana Consulting, «la nueva mafia en el poder está en un momento de debilidad, porque han perdido la cabeza de la serpiente», refiriéndose a López-Calleja.
«El que ha muerto es el cancerbero de la nueva mafia, el cancerbero del dinero, del poder; el responsable del dinero sucio o limpio que llega al régimen; el dueño del capital con el que el régimen construye hoteles y mata de hambre al pueblo; el hombre responsable de la agonía de los cubanos; del fin de las reformas que se mataron en 2016 en medio del acercamiento con Obama», aseguró.
«El responsable de la tragedia de la pandemia, cuando no decidieron comprar vacunas probadas para en cambio invertir en hoteles, mientras el pueblo sufría por falta de comida y medicinas», insistió.