Pinar del Río, 15 jun (ACN) En los campos de la Empresa Agroindustrial de Granos (EAIG) Los Palacios, de Pinar del Río, se priorizan las labores de cosecha de arroz tras las intensas lluvias que afectaron a la provincia a inicios del mes de junio.
Con pérdidas estimadas hasta ahora en una dos mil toneladas de arroz cáscara húmedo, la entidad debe recolectar unas mil 340 hectáreas ya maduras, la mayor parte de ellas enclavadas en la estructura productiva Agrícola Vueltabajo.
Allí se concentra la maquinaria de otras granjas para tratar que no aumente el daño a las plantaciones, como parte de las prioridades establecidas de cara a cosechar en el menor tiempo posible.
Ariel García Pérez, director general de la EAIG, explicó que actualmente cuentan con 16 combinadas en funcionamiento y debido a las roturas- por los años de explotación- la disponibilidad se comporta entre el 60 y el 70 por ciento.
Trabajamos para reducir el tiempo de solución de las averías, dijo, sobre todo porque antes de las lluvias el rendimiento era de tres toneladas por hectárea y hoy oscila entre 1.5 y 1.6.
Unas 3.6 hectáreas debían ser cosechadas en el campo 44 al momento de la visita de un equipo de prensa, que pudo constatar el esfuerzo por recoger el cereal en una de las tantas áreas que quedó bajo agua a causa de las precipitaciones.
Todo el mundo se pone en función de las máquinas cuando se rompen para “sacarlas” en poco tiempo, aseveró Omar García Triana, al frente del pelotón de combinadas.
Hay arroz acamado que resulta más difícil de cosechar, pero las jornadas las extendemos hasta que haya iluminación en las zonas agrícolas, precisó.
Algunos de los que han dedicado no pocos años a estas labores aseguran nunca haber visto tanto arroz anegado en agua, y que la recolección se torna más compleja debido a la siembra en curvas de nivel en la mayor parte de las áreas de la Empresa.
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Porque al cultivo del grano se dedican unas 24 mil hectáreas de manera general en la EAIG y solo dos mil se encuentran en terrazas planas.
Ante dificultades para sostener una producción que demanda gran cantidad de combustible, la actual cosecha cuenta con el respaldo de la planta de gasificación de cáscara de arroz Enrique Troncoso, un proyecto inaugurado en 2019 con vistas al secado del cereal, a partir de lo que se consideraba un desecho.
No gasta diésel en ese proceso y, por ejemplo, en mes y medio se han secado unas mil 367 toneladas, las cuales representan un ahorro de más de 22 mil litros de combustible, apuntó Yusniel Illas Ramírez, jefe de brigada de la planta.
