HAVANA WEATHER

Los derrotados del concierto de Pablo

Hubo un momento en que nos sentamos en el piso de losas, justo debajo de la ventana de la taquilla del Teatro Nacional, en círculo, con las mochilas sobre los pies y el cansancio sobre los hombros; nos sentamos como los amigos que muchos no éramos —ni somos— y en la conversación quisimos recordar una canción de Pablo que estuviera acorde al momento: ninguno pudo —no la sabíamos o quizá no existe. Yo pensé en el poeta Alberto Rodríguez Tosca y su libro de Las derrotas.

Por eso en este recuento «no habrá lamento pero habrá un gemido. Un solitario gemido de papel a la luz de dos lunas. La mía, y la vieja luna del mundo sobre cuyas laderas se acostarán hoy con la muerte los derrotados»: el anciano que salió a las cuatro de la mañana de Punta Brava y marcó delante de nosotros, que lo hizo por una vecina que lo quiere mucho y se merecía su esfuerzo; las dos señoras que aman a Pablo, que se pasan horas escuchándolo en sus casas, que tienen anécdotas de conciertos de antes de que mi madre estuviera en primaria, que se tienen que ir a las cinco para prepararle la merienda a sus nietos que regresan del Conservatorio de música; mi amigo y tocayo Fabio, que llegó a las siete de la mañana y solo tiene un pan con jamón en el estómago; la muchacha rubia que faltó al trabajo; el que labora en el INDER y llegó en un P12 (y se irá en uno) desde Fontanar; la rubia cuarentona del short rosado y corto que se indignó, como toda una derrotada, cuando la directora del Teatro Nacional intentó justificar por qué no se le podían vender más entradas al pueblo que desde la noche anterior se reunía ahí.

El concierto de Pablo Milanés, aunque es el próximo 24, comenzó el 14 para algunas personas; para otras, a las cinco de la madrugada del 15, o a las las siete de la mañana, o a las 8 y cuarto. Para un señor empezó a las cuatro de la tarde, cuando se atrevió a gritar «¡el último!», después de que hacía mucho los últimos éramos todos, los quedados.

En el Teatro Nacional, solo la mitad de una hoja impresa pegada a una de las taquillas anunciaba el evento. Las entradas comenzaron a venderse a la 1:06, por una sola ventanilla para atender a muchas personas que esperaban bajo el sol. Sobre la 1:45, una mujer que intentaba colarse, junto a un pequeño grupo de seguidores, comenzó a dar un escándalo. Protestaba a los trabajadores del teatro que trataban de organizar el barullo, e incluso a los policías. Gritaba y se contradecía en sus propósitos: primero venía a comprar entradas solo para unos amigos, luego pedía para ella.

Pablo - derrotados

Hubo un momento en que nos sentamos en el piso de losas, justo debajo de la ventana de la taquilla del Teatro Nacional, en círculo, con las mochilas sobre los pies y el cansancio sobre los hombros. (Foto: Tomada del perfil de Facebook de Luz Escobar)

En taquilla decidieron parar la venta mientras continuara la trifulca, aunque poco después se reanudó, hasta que tocó el turno a la periodista independiente Luz Escobar: por orden de la dirección del teatro hasta ahí se expederían, únicamente los asientos del segundo balcón porque el primero y la platea «ya estaban llenos». Cerca quedaron también de comprar Lynn Milanés y su esposo Hernán, que pese a ser invitados de Pablo, quería adquirir entradas para varios amigos.

Ante reclamos y gritos —también intentos de aclarar la situación por parte del yerno de Pablo— llegó Nereida López Labrada, antigua secretaria general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Cultura y quien desde hace poco ocupa el cargo de directora del teatro. Dio una justificación como si todavía estuviera en su antiguo cargo: habló sin decir mucho y se refirió a «cantidades de entradas otorgadas a los organismos». Ante la desaprobación creciente, respondió que «esos organismos tienen trabajadores», como si los que estuviéramos haciendo la cola fuéramos vagos que no pertenecemos a esos mismos centros a los que se refería. Finalmente, cerró como cierran los que abusan del poder: «la explicación está dada».

Después de eso, se encerró en su despacho —quizá para acomodar el cuadro de Rebustillos que le habían obsequiado en horas de la mañana por su buen desempeño en la dirección del teatro.

Nadie fue capaz de darnos las cifras exactas de cuánto se había vendido en 54 minutos, por más que las exigimos. ¿Bajo qué criterio cerraron la taquilla a las dos de la tarde, si aún existían entradas dado que no pasaron más de sesenta personas?  Según la directora, el teatro tiene 2056 butacas. Si suponemos que cada uno de los que pudo comprar, se llevó cuatro entradas, ¿a dónde fueron las más de 1800 restantes? ¿No pueden los trabajadores del Teatro Nacional hacer elementales cálculos de bodega o es que ya todo estaba calculado y sopesado? ¿Cuánto para la UJC, el PCC, los ministerios y una sombra larga de organismos según la directora?

La cuarentona del short rosado y corto tuvo un ataque. De la boca le salía una baba blanquecina como de epilepsia. «¡El teatro y Pablo Milanés son del pueblo y para el pueblo! ¿Hasta cuándo los barrigones van a mandar? ¿Hasta cuándo el avasallamiento al pueblo? ¡Esto es vergüenza contra dinero, como Chibás!», discursaba enrojecida y dejó mudos a los trabajadores, la policía y un agente de la Seguridad del Estado presente. La gente a su alrededor la aplaudía como tal vez nunca en ningún sitio.

Pablo - derrotados

El yerno de Pablo pedía una salida mediante el diálogo y la comprensión. Se prometieron gestiones y llamadas, pero los minutos pasaban sin respuesta y la gente se iba y se iba, hasta que quedamos unos cuantos con hambre y sin entradas. «Resistíamos con creatividad», como pide una y otra vez Díaz Canel. ¿A qué se puede resistir si no es a uno mismo? 

A las cuatro de la tarde, una trabajadora del teatro pasó para informar que no iban a dar más entradas. Sin embargo, unos minutos antes Hernán nos había dicho que era posible que algo se resolviera. Una hora después, lograría entrar al despacho de la directora donde recibió la confirmación de que de ninguna manera se iban a vender más entradas. Para los pocos que permanecíamos luego de doce horas de cola, era reconocer, parafraseando a Pessoa, que habíamos fracasado y solo nos pasmaba no haberlo previsto. Como el portugués, en ese instante podíamos preguntarnos: ¿qué había en nosotros que pronosticase un triunfo? «No teníamos la fe ciega de los vencedores o  visión certera de los locos». 

No, no teníamos más que sed y ganas de vencer la derrota. Yo era, a la salida del teatro, poco más que el personaje literario que describe Rafael Alcides en un ensayo: «un pobre desesperado que al salir del bar volverá a ser multitud, cifra, nada, me digo, criatura que en un mundo sin respuestas sueña y cae y busca a Dios sin encontrarlo…». 

Con rabia reconozco que no puedo recordar aun nada de Pablo Milanés. Si con Borges cierra Rodríguez Tosca sus Derrotas, con Borges cerraré yo las mías (y las de unos cuantos): «Yo sé (todos lo saben) que la derrota tiene una dignidad que la ruidosa victoria no merece».

Comparte:
Publicaciones

Artículos Relacionados

 

Contáctenos

 

Si desea contactar NoticiasCubanas.com, el portal de todas

las noticias cubanas, por favor contáctanos.

¡Estaremos felices de escucharlo!

 

Con gusto le informáremos acerca de nuestra oferta de publicidad

o algún otro requerimiento.

 

contacto@noticiascubanas.com

 

 

Términos de uso

NoticiasCubanas.com es gratis para todas las personas, nosotros no cobramos ningún cargo por el uso del sitio de ninguna manera. Leer los artículos es completamente gratis, no existe ningún costo oculto en nuestro sitio.


Proveemos una colección de noticias cubanas, noticias internacionales sobre Cuba para cualquier persona interesada. Nuestros usuarios utilizan NoticiasCubanas.com bajo el acto de libre elección y bajo su propia Responsabilidad.

Nosotros no recolectamos ningún tipo de información de nuestros usuarios, no solicitamos ninguna dirección electrónica, número telefónico, o ningún otro tipo de dato personal.

 

Medimos el monto de tráfico que noticiasCubanas.com recibe, pero no esperamos compartir esta información con alguien, excepto nuestros socios de publicidad. Nos regimos bajo las normas Cubanas en cada cuestión legal, cualquier aspecto no clarificado aquí debe ser considerado sujeto bajo el sistema Legal de Cuba.

 


Oferta


Si deseas saber como tu sitio de noticias puede formar parte de nuestro sitio NoticiasCubanas.com, o si deseas publicidad con nosotros.

 

Por favor, póngase en contacto para mas detalles.

Estaremos felices de responder a todas tus dudas y preguntas sobre NoticiasCubanas.com. ¡La casa de todas las noticias cubanas!

contacto@noticiascubanas.com


Sobre nosotros

NoticiasCubanas.com es la casa de todas las noticias cubanas, somos un sitio conglomerado de noticias en Cuba. Nuestro objetivo es darle importantes, interesante, actuales noticias sobre Cuba, organizadas en categorías.

Nosotros no escribimos noticias, solo recolectamos noticias de varios sitios cubanos. Nosotros no somos parte, solo proveemos noticias de todas las fuentes de Cuba, y de otras partes del mundo.

Nosotros tenemos un objetivo simple, deseamos brindarle al usuario el mayor monto de noticias con calidad sobre Cuba, y la visión que tiene el mundo sobre Cuba. Nosotros no evaluamos las noticias que aparecen en nuestro sitio, tampoco no es nuestra tarea juzgar las noticias, o los sitios de las noticias.

Deseamos servir a los usuarios de internet en Cuba con un servicio de calidad. Este servicio es gratuito para todos los cubanos y todos aquellos que estén interesados en las noticias cubanas y noticias internacionales sobre Cuba.