La Habana, 15 jun (ACN) El sitio de la Cancillería cubana, Cubaminrex publicó hoy parte de la intervención de Yusnier Romero Puentes, representante permanente alterno de Cuba ante Naciones Unidas, quien agradeció el apoyo brindado por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) a los esfuerzos cubanos para dar respuesta a la pandemia de COVID-19.
Durante la Sesión Anual de la Junta Ejecutiva de la organización, el diplomático cubano reconoció la labor decisiva de UNICEF en el país para el fortalecimiento de las capacidades de las instituciones de salud, especialmente los centros dedicados a menores y mujeres embarazadas.
Romero Puentes ratificó el compromiso de la isla con garantizar la salud y bienestar de las niñas y niños cubanos, así como la protección de todos sus derechos refrendados por la nación caribeña.
En Cuba no hay nada más importante que la vida de un niño y las máximas autoridades y el gobierno trabajan por construir una sociedad donde se respete el derecho a una infancia feliz, enfatizó el embajador.
Por ejemplo, explicó que como parte de la estrategia de inmunización contra la Covid-19, la vacunación pediátrica fue priorizada, siendo Cuba el primer país en inmunizar a su población infantil entre 2 y 18 años.
Como parte de ese proceso, se logró vacunar a más de 1 millón 700 mil niñas y niños, sin reportar eventos adversos graves y ofreciendo una cobertura vacunal superior al 96 por ciento, añadió.
Explicó Romero Puentes que de manera simultánea a la inmunización, el Programa Nacional de Vacunación, de carácter universal y gratuito, garantiza la protección de la población infantil contra 13 enfermedades, de las cuales seis permanecen erradicadas en la actualidad.
La dirección de UNICEF en Cuba colabora con las instituciones nacionales para garantizar los derechos y la igualdad de oportunidades de desarrollo de niñas, niños y adolescentes y para fortalecer una cultura de derechos y participación.
En el contexto de la actualización del modelo económico cubano, la organización apoya los esfuerzos del gobierno para sostener los logros ya alcanzados en el bienestar de la infancia y la adolescencia y para hacer frente a nuevos desafíos.