Después de cargar en sus espaldas con el doloroso e increíble error de su cuerpo de dirección, que los privó de su pase a la final, el equipo Cuba de béisbol que participa en el Premundial sub-15 en Venezuela derrotó por fuera de combate a su similar de Puerto Rico 11-1 para quedarse con la medalla de bronce del torneo.
Sin dudas a los jóvenes peloteros cubanos hay que ovacionarlos hasta el cansancio por salir al terreno este sábado golpeados psicológicamente por una pifia inadmisible, y volver a sacar esa garra que los caracterizó durante toda la competencia.
Cuando en la jornada anterior, su director Luis Manuel Góngora utilizó un serpentinero inhabilitado por lanzamientos y violó el reglamento del torneo, en un acto inaudito que provocó la confiscación del partido donde habían salido vencedores ante los anfitriones venezolanos, muchos pensaron que esos aguerridos bisoños se desplomarían sobre la grama.
A golpe de batazos los cubanitos demostraron una vez más que fueron el mejor equipo del evento, y es por eso que esa medalla de bronce les duele tanto a los amantes de nuestro deporte nacional, dañado una vez más por malas prácticas de sus directivos.
Como consuelo está la obtención del boleto para el Campeonato Mundial de Hermosillo, México, previsto para comenzar este mismo mes de agosto, aunque quedará perpetuado en el tiempo esa sensación de que nuestro equipo hubiera podido coronarse por primera vez desde que se instauraron estos campeonatos panamericanos de la categoría.
Con respecto al partido, los nuestros volvieron a fabricar un gran racimo de seis anotaciones cuando sus rivales tomaron el mando en la pizarra en el mismo inning de apertura, para sentenciar ahí mismo las acciones, en un acto de vergüenza deportiva de altas dimensiones.
En el quinto, con otro paquete de cinco carreras, terminaron las angustias de sus contrarios por la ley de la misericordia, para cerrar el torneo por todo lo alto.
Destacaron a la ofensiva Alejandro Cruz con doble y triple en cuatro turnos al bate y un trío de remolques, y Alejandro Prieto, perfecto de 2-2 con un triple incluido y dos impulsadas.
Mailon Batista relevó los últimos dos capítulos sin permitir jits y se llevó la victoria, se segunda en este Premundial.
Equipo Cuba sub-23 mantiene el invicto
El equipo Cuba sub-23 que participa en el Panamericano de Aguascalientes, México, logró su segundo triunfo del torneo al batir 3-1 a la escuadra de Venezuela, y se colocó un paso más cerca de alcanzar uno de los cuatro cupos mundialistas que ofrece la competencia.
Los morochos inauguraron el casillero de las carreras a la altura del cuarto capítulo, cuando lograron repletarle las almohadillas al abridor Yulián Quintana con un sencillo y par de boletos, y Juan Bidau se anotó un jit por el infield ante un envío del relevista Yosvani Ávalos.
Un racimo de tres anotaciones cerrando el quinto inning fue suficiente para que los discípulos del experimentado Armando Jonhson se llevaran el triunfo en el choque.
La rebelión antillana se organizó con un sencillo del emergente Yuri Marcos Fernández, que igualó las acciones, y un doblete de Danys Oramás, válido para sacar del box al relevista Sonny Rafael Vargas, quien fue incapaz de apagar el fuego que se extendía sobre el campo del estadio de la Unión Deportiva San Pancho.
Un boleto intencional a Alfredo Fádraga que colmó las almohadas, y otro de libre tránsito al jonronero de la jornada anterior Javier Carabeo, trajo a casa la ventaja, y Alejandro Escobar sonó cohete al medio para completar el paquete letal.
Ávalos apenas permitió un imparable en 1.2 entradas para llevarse la victoria, y del resto se ocupó el bombero Marlon Vega, al retirar a los seis contrarios que enfrentó, la mitad de ellos por la vía del ponche, para anotarse el salvamento.