Se me antoja catalogar como el mejor en la “era de los legionarios”, el triunfo este jueves de la selección absoluta cubana de fútbol, por 2-0 ante Antigua y Barbuda, por el grupo A de la Liga B de la Liga de Naciones de Fútbol por el área de Concacaf, válido para llegar a seis puntos de nueve posibles y encabezar la llave por mejor promedio de goles a favor y en contra que su victimario de marras y la escuadra de Guadalupe.
En el partido que se disputó en el Warner Park, de Basseterre, capital de Saint Kitts y Nevis, y para deleite de hinchas y especialistas cubanos, la tropa del técnico pinareño Pablo Elier Sánchez, pletórica de jugadores que se desempeñan en ligas foráneas, le dio un recital de buen fútbol durante los 90 minutos de juego a un rival que puso el músculo, pero se vio superado por el arte de los nacionales “dibujado” sobre el césped.
Solo un cambio realizó Pablo Elier con relación al equipo que venció a Barbados por goleada de 3-0: Yunior Yuri Pérez ocupó el puesto de defensa central en sustitución del lesionado Yosiel Piedra… y el guantanamero cumplió las funciones ad pedem literae.
Una vez más y como se ha hecho habitual en los diseños de juego del timonel vueltabajero, Cuba siempre presionó la salida del rival y encauzó su ataque por el franco izquierdo, con el lateral Jorge Luis Corrales, las llegadas al área del volante mixto William Pozo y las habilidades en la conducción del balón del extremo Onel Hernández, quien se gastó un partidazo y fue denominado como mejor jugador del partido.
Las estadísticas hablan por sí solas del trabajo del jugador del Norwich City inglés: un gol, cuatro disparos a puerta y dos robos de balón.
El primer gol cubano llegó al minuto 16, con una veloz internada de Pozo, que centra el balón y el extremo derecho Luis Javier Paradela lo golpea de cabeza, inatajable para el cancerbero Nicholas Townsend.
Cuba mantuvo su dominio del juego, con especial énfasis en el mediocampo. Abría las bandas y sus atacantes pisaban en reiteradas ocasiones el área rival. Así, llegó la segunda diana, que fructificó con un contragolpe en el minuto 83, segundos después que el portero tunero Sandy Sánchez evitase el empate con un estirón de manos para mantener su valla en cero.
Corrales salió con el balón y Onel, como merecimiento al esfuerzo realizado en todo el juego, tuvo la oportunidad de concretar el contragolpe con un disparo cruzado de derecha entre las piernas del portero rival.
Los dígitos del cotejo reflejan el dominio cubano: 52 por ciento de posesión del balón por 40 su oponente; disparos (14 por 5) y en recuperaciones (19 por uno).
Tras este resultado, Cuba, Guadalupe y Antigua y Barbuda tienen seis puntos, pero los Leones del Caribe poseen mejor promedio de goles a favor y en contra (+4), Guadalupe (+1) y Antigua (0).
Este domingo, Cuba disputará el partido de vuelta contra Antigua y Barbuda en la pista sintética Antonio Maceo, de Santiago de Cuba.