Al menos tres familias cubanas quedaron sin hogar tras un derrumbe en la noche del miércoles de la edificación en que vivían en La Habana, fuentes ciudadanas explicaron que no hubo fallecidos ni lesionados.
Varios testigos confirmaron que el incidente tuvo lugar en un inmueble del municipio de Centro Habana.
“Derrumbe ahora mismo en La Habana esquina San Lázaro y Genios, Centro Habana, Viven tres Familias en el edificio”, publicaron usuarios de la capital cubana en la red social Facebook.
En algunos videos compartidos luego del siniestro se ve a los bomberos trabajando en el lugar.
Las expresiones de los cubanos van de la sorpresa, al dolor y a la impotencia, porque a pesar de que salvaron las vidas, acaban de perderlo todo.
“De terror, caminar por San Lázaro debería considerarse ejercicio de alto riesgo”, dice una internauta cubana que conoce el sitio ya que a simple vista puede observarse el deterioro elevado de cientos de inmuebles en esa conocida calle habanera.
En solo 24 horas y tras las fuertes lluvias ocurridas la semana anterior las autoridades cubanas informaron que habían ocurrido al menos 290 derrumbes en el país. La Habana, la provincia más afectada confirmó «148 derrumbes, de ellos: dos totales y 146 parciales”.
Pero desde que comenzó a llover torrencialmente en el Occidente de la isla, los cubanos, entendidos en el problema por tantos años de experiencia, consideraron que cuando terminaran las lluvias y las paredes centenarias comenzaran a secarse, ocurrirían más siniestros de este tipo.
Además del peligro de perder la vida, los cubanos experimentan el trauma del siniestro en este tipo de hechos.
El lunes el diario Girón reportó que los miembros de varias núcleos familiares cubanos que salieron ilesos de un derrumbe ocurrido en la noche del domingo en Matanzas, permanecieron por horas atrapados y sin poder salir del inmueble prácticamente destruido.
La vivienda ubicada en la ciudad de Matanzas sufrió un derrumbe parcial en la noche cuando el barrio se encontraba en pleno apagón.
Según Noel Hernández Echevarría, propietario del inmueble, quien hizo declaraciones a la prensa oficialista, en el sitio residían al menos tres núcleos familiares.
Una familia pasó momentos de incertidumbre a la espera de poder salir del lugar derrumbado pues hasta la mañana del lunes un grupo de ellos permaneció incomunicado ante la obstrucción por los escombros”, confirmó Girón.
Noel Hernández uno de los afectados dijo a la prensa: “Todo fue muy rápido. Mi esposa y yo estábamos terminando de ver Tras la Huella cuando sentimos el estruendo y enseguida supimos que era el techo porque llevaba tiempo en mal estado. En esa parte de la casa no vive nadie, solo mi sobrino en el primer cuarto porque nosotros vivimos al fondo con mi otro hermano. Por suerte no causó ningún daño” señaló en su relato.
Al sitio acudieron autoridades y una brigada del cuerpo de bomberos y la Empresa de Mantenimiento y Construcción de Matanzas (EMCON), quienes evaluaron los daños y dijeron que tras una comisión, probablemente lo que quedó de la vivienda deba ser demolido.