Cargado de amor, unidad y fraternidad partió esta mañana de los almacenes de Suministro y Transporte Habana, ubicado en Avenida Vento y Santa Catalina, en el Cerro, para la Villa Panamericana, un donativo de efectos electrodomésticos y avituallamientos para familias afectadas por el lamentable accidente del hotel Saratoga.
El mismo fue realizado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en conjunto con el Programa Mundial de Alimentos (PMA), entre otras organizaciones regionales, entregado al Gobierno de la capital.
Durante una sencilla ceremonia a la que asistieron Luis Carlos Góngora, coordinador de Programas del Gobierno de La Habana; Maribel Gutiérrez, coordinadora residente del PNUD, en la Isla; Alejandra Trossero, representante de la UNICEF en Cuba; así como Gabriela Hernández, representante del Programa Mundial de Alimentos, entre otras personalidades, se reconoció el esfuerzo humano y de integración institucional ante situaciones de desastres, el ejemplo de Cuba en su respuesta, así como los estrechos lazos de solidaridad y colaboración.
Gutiérrez resaltó que es un orgullo para el PNUD tal colaboración dirigida a esas personas que lo perdieron todo y significó los estrechos lazos de ayuda y colaboración en programas de desarrollo y en las experiencias vividas para fortalecer aún más los lazos de unidad.
Por su parte, Carlos Góngora habló sobre esos difíciles días en que el pueblo se creció y de la titánica lucha de rescatistas, entidades y fuerzas, entre tantos otros. También agradeció el gesto de donativos para los damnificados de este lamentable accidente, y la respuesta nacional a la atención integral a los mismos.
(Tomado de Tribuna de La Habana)