Una joven madre en el sur de Florida, deberá enfrentarse a la justicia, por la muerte de su bebe de 7 meses que murió ahogado en una bañera acompañado de un hermanito de tan solo 3 años, mientras ella salió al garaje a hacerse una manicure.
La policía se presentó en la casa de Alyssa Carolyn Jimmie, el viernes 20 de mayo a las 2:30 pm, situada al sureste de Miami-Dade, encontrando al bebe inconsciente.
Según Jimmie de 22 años le dijo a la policía que había dejado al bebé en la bañera con su hermano de 3 años con el agua abierta. Los dejó solos mientras iba al garaje de la residencia para hacerse las uñas en un salón de manicura casero.
La policía comprobó que el salón de belleza se encuentra a unos 62 pies (más de 18 metros) de distancia de la bañera del baño principal de la casa.
Jimmie, explica a los investigadores que no vio peligro al dejar a los niños en la bañera ya que no había un “tapón de desagüe”, por lo que pensó que el agua no se podía acumular, agregando que alrededor de 5 o 10 minutos regreso y pudo ver que el desagüe se había tapado con una toallita de papel, lo que hizo que la bañera se llenara, encontrando al bebe inconsciente y al hermanito aun jugando dentro.
La madre del niño trató de darle reanimación cardiopulmonar y después fue a casa del vecino para llamar al 911 pues su teléfono móvil estaba dañado.
Al niño lo llevan al HCA Florida Kendall Hospital.
El médico forense del condado de Miami-Dade determinó que el bebé había muerto por ahogamiento accidental.
La joven madre Jimmie es miembro de la tribu Miccosukee de Florida, su padre Cesar Jimmie, se encontraba en la sala del tribunal el jueves mientras se enfrentaba a un juez, sobre su hija dijo que siempre ha sido una buena hija, “una buena hermana mayor. Siempre ha amado a sus hijos”.
“Es un conjunto de eventos muy tristes. Lamento tu pérdida”, dijo Mindy Glazer, la jueza de la corte de Circuito de Miami-Dade, fijando una fianza de $ 10,000 dólares, agregando:
“Asegúrese de mantenerse en contacto con su abogado y escuchar lo que le dicen”. Jimmie fue acusada de homicidio agravado de un niño.
El médico forense le aplicó la autopsia al bebe el 24 de mayo, a pesar de que el jefe de la tribu Miccosukee de Florida se puso en contacto con el Departamento Médico Forense del condado de Miami-Dade y exigió que no se realizara una autopsia al bebé.
Un miembro de la tribu había dado instrucciones a Jimmie para que no hablara con las fuerzas del orden hasta que la tribu hubiera contratado un abogado para ella.
La Tribu Miccosukee de Florida es una tribu reconocida a nivel federal y un gobierno soberano.
