Sin embargo, varias entidades mantienen pérdidas y una gestión ineficiente
La “Plásticos Escambray” se encuentra entre las 26 empresas que no han tenido una situación favorable en lo que va de año. (Foto: Vicente Brito/Escambray)
Lentamente, y en correspondencia con la recién anunciada tendencia nacional, la economía espirituana comienza a dar algunas muestras de recuperación, a juzgar por el comportamiento positivo de varios de sus indicadores.
Por ejemplo, según el informe debatido durante el más reciente Consejo de Gobierno en el territorio, en los primeros meses del año las ventas netas se comportan favorablemente y crecen con respecto al 2021, aunque incumplen tres municipios —Cabaiguán, Fomento y La Sierpe—, y 26 empresas, entre ellas varias entidades de Comercio, Granos Sur del Jíbaro, la Obdulio Morales, Refinería Sergio Soto, Tabaco Torcido, Ramón Ponciano, Plásticos Escambray y Aldaba.
Por otra parte, en las utilidades antes de impuestos también se sobrepasa lo proyectado, pero decrecen con respecto al año anterior y 25 entidades cierran con pérdidas, la mayoría de ellas pertenecientes a la cabecera provincial.
En cuanto a la eficiencia registrada, evidente en el total de gastos por peso de ingresos, Sancti Spíritus logra un resultado aceptable, aunque se mantienen empresas con elevados gastos como Valle del Caonao, Cemento Siguaney, Transporte Provincial, Suministros Agropecuarios y Comercio en los municipios de Yaguajay, Taguasco, Fomento, La Sierpe y Sancti Spíritus.
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En cuanto a la circulación mercantil minorista del propio Grupo Empresarial de Comercio, se cumple casi al 96 por ciento, a pesar de no recibir varios de los suministros previstos como materiales de construcción, productos de higiene y limpieza, comestibles, bebidas alcohólicas y surtidos relacionados con el programa energético.
En la entrega de productos para la exportación también se sobrepasa lo concertado, al igual que en los ingresos cedidos y en la mayoría de los renglones agropecuarios; sin embargo, la ejecución del presupuesto local, las cuentas por cobrar y pagar, así como los pasajeros transportados mantienen desfavorable tendencia.
A pesar de los discretos pasos que, en general, comienza a dar la economía espirituana en estos y otros indicadores, mucho queda por andar y corregir para satisfacer las múltiples necesidades que aún agobian a la población.
