MIAMI, Estados Unidos. — El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel arribó este mediodía a las inmediaciones del Hotel Saratoga tras la explosión que dejó al menos ocho muertos y decenas de heridos y desaparecidos.
Medios oficiales de la Isla indicaron que Díaz-Canel llegó al lugar en compañía del primer ministro del régimen, Manuel Marrero, y del presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Esteban Lazo Hernández.
En declaraciones reproducidas por la Presidencia de Cuba, el mandatario descartó que se tratase de un acto terrorista, como se especuló en principio en redes sociales.
“No ha sido una bomba ni un atentado, es un lamentable accidente”, aseguró el sucesor de Raúl Castro sobre la tragedia.
Díaz-Canel señaló además que los hospitales “están en función de todos los lesionados” y que “se continúa trabajando en las actividades de rescate”.
La Presidencia de Cuba también confirmó en Twitter que el siniestro fue provocado por un escape de gas y que en próximas horas las autoridades ofrecerían más detalles al respecto.
Cifras preliminares difundidas por las autoridades de la Isla dan cuenta de ocho fallecidos , 13 personas se personas desaparecidas y otras 30 hospitalizadas, entre ellas varios niños.
Emilio Delgado Iznaga, director provincial de Salud de La Habana precisó que el sistema sanitario de la capital se encuentra activo en su totalidad y que varios ciudadanos están donando sangre.
Las autoridades también indicaron que la mayoría de los afectados fueron trasladado a los hospitales Calixto García y Hermanos Ameijeiras.
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