El Festival Internacional de Danza en Paisajes Urbanos Habana Vieja promueve el intercambio con la comunidad y con festivales del mundo, además de revalorizar el patrimonio de las ciudades.
Foto: Cortesía del grupo Danza Teatro Retazos.
La Habana, 23 abr.- Plazas, calles, salas de teatro, espacios de creación se abren para acoger, después de dos largos años, la edición 26 del Festival Internacional de Danza en Paisajes Urbanos Habana Vieja, ciudad en movimiento.
Organizado desde 1996 por la compañía Danza Teatro Retazos, dirigida por la coreógrafa Isabel Bustos y que celebra su aniversario 35, el evento toma los espacios públicos para que la danza y otras manifestaciones artísticas tomen por sorpresa a los transeúntes y convertirlos en coprotagonistas.
El festival persigue incentivar la creación artística y el desarrollo de creadores e intérpretes danzarios, brindar una experiencia asequible, formativa y estimulante para la vida cotidiana de la comunidad, establecer una plataforma de intercambio entre festivales del mundo y revalorizar el patrimonio de las ciudades.
Para Bustos, el festival “es un nuevo comienzo para animar las calles del Centro Histórico, ver la cultura desde un ángulo diferente, pero tan importante como cualquier otra manifestación”.
Con Retazos, dijo, lleva trabajando “toda la vida, 35 años en La Habana Vieja, y el festival es una continuidad, para que los jóvenes, los nuevos coreógrafos, se enamoren de los proyectos y le pongan fe y la vida a lo que hacen”.
Evento cultural multiplataforma
Según explicó Eugenio Chávez, coordinador general de la cita, ante la imposibilidad de tener en La Habana a los invitados extranjeros habituales, está abierta la programación on line, con la etiqueta #festivalcallejero2022.
“Les propusimos defender sus ciudades con la danza, con fragmentos de sus barrios más queridos, sus plazas, haciendo coreografías en esos espacios y ese resultado se va a ver en las redes sociales del 22 al 24 de abril”, en los perfiles en Instagram y Facebook de Danza Teatro Retazos y DV Danza Habana.
La parte presencial, acotó, tiene como característica que llegará a la Plaza de Armas y al Jardín Las Carolinas, con una programación diversa en grupos, temáticas y modos de asumir la danza, así como con la participación de estudiantes de la Universidad de las Artes y la Escuela Nacional de Arte.
A su vez, en un espacio nombrado Comunidad danzante, se aprovecha la oportunidad de acercarse al trabajo de las comunidades, “y son también esas iniciativas las que van a colmar de danza las calles”, destacó.
En tal sentido, Katia Cárdenas, directora de Gestión cultural de la Oficina del Historiador, resaltó el activismo social y el trabajo en las comunidades desarrollado por Bustos y la compañía con personas de la tercera edad y la niñez, entre otras experiencias.
A las propuestas culturales se suma, entre el 21 y el 24 de abril, el Festival de Videodanza DV Danza Habana. Movimiento y Ciudad, que tiene como sedes varios escenarios: Fábrica de Arte Cubano, Sala de la Diversidad y Habana Espacios Creativos, así como la programación en línea en las redes sociales Instagram y Facebook de Danza Teatro Retazos y DVDanza Habana.
Según su director artístico, Andrés D. Abreu, en esta ocasión se presentan creaciones procedentes de España, Reino Unido, México, Estados Unidos, Chile, Finlandia, Uruguay, Ecuador, Brasil, Argentina y Cuba.
Pasado y presente
En conferencia de prensa, Bustos recordó los primeros pasos del grupo en el Centro Histórico, gracias a que el trovador cubano Silvio Rodríguez la puso en contacto con el entonces historiador de la ciudad, Eusebio Leal (1942-2020).
Ecuatoriana residente en Cuba, la coreógrafa tuvo un primer espacio en la segunda planta de la Casa Guayasamín.
Michael González, director del Patrimonio Cultural de la Oficina del Historiador recordó que Leal fue siempre un defensor de danza callejera y del proyecto Retazos y destacó que constituye un orgullo grande seguir desarrollando este encuentro, que le imprime a la oficina y los espacios públicos color, movimiento y creatividad.
“Hemos tenido que hacer maravillas para mantener la danza callejera y para que se respete, porque siempre se piensa que la danza debe estar en los teatros. Hacer una danza de nivel en la calle era algo que al principio no se entendía, pero ahora sí, se entiende, se comprende, se respeta y se respeta el festival”, comentó.
El festival se realiza dentro del proyecto de cooperación internacional Promoviendo el desarrollo cultural de La Habana Vieja para el disfrute y preservación del patrimonio, con herramientas de comunicación para la transformación social, con la colaboración de la oenegé Kcd Ongd y el financiamiento de la Agencia Vasca de Cooperación para el Desarrollo, señaló Cárdenas. (2022)