La mejor frase que por años escuchase Guillermo Francella se la dijo Fidel en 2003: «¿Tú eres consciente de lo que es hacer feliz a un pueblo? Tú haces feliz a mi pueblo», recordó el popular comediante argentino en una emisión de Playroom (ESPN 3).
El artista había llegado a Cuba para participar en el Festival del Nuevo Cine Latinoamericano. «Fui de sábado a sábado y siempre me decían: “El Comandante te quiere ver”, pero nunca me venían a buscar». Hasta que el último día, con la valija medio hecha, y estando en la piscina del Hotel Nacional, «veo que entra un tipo de fajina y digo: “¿Qué pasó?”. Se acercan a mí y me dicen: “Señor Francella, el Comandante lo quiere ver”. Me bañé rápido y les dije: “Miren que el avión sale”. “Tranquilo, no sale”, me dijeron».
Francella volvió sobre ese momento «inolvidable» y manifestó: «Lo vi y fue muy fuerte (…). Estuve como una hora y pico con él». Desde las seis de la tarde ambos compartieron mojitos, tabacos e impresiones sobre el ciclo de humor Poné a Francella que hacía vibrar a América Latina y a Cuba con las carcajadas del público. «Fue una charla a solas en la que me preguntó muchas cosas y por mi familia. No se habló nada de política, poco y nada», afirmó.
Cuando Francella revive esa visita, piensa también en la numerosa comitiva que lo esperaba en el aeropuerto, y en lo que significó para él caminar por las calles de La Habana: «cuando llegué me di cuenta de que era como un jefe de Estado».
