El humorista cubano Ulises Toirac se burló en sus redes sociales del espeluznante desfile del Ministerio de Comercio Interior (Mincin) y utilizó el doble sentido para ironizar sobre el mismo, asegurando que así florecía la economía cubana.
“Cuando una economía florece, se refleja en todas las esferas y a todos los niveles”, ironizaba el cómico cubano en su Facebook, mientras colgaba una imagen del modelo del “osito”.
Toirac agregó que cada año el MINCIN hacía un evento nacional al que llaman “Encuentro Nacional de Técnicas Comerciales. En el de este año, ese desfile formó parte de ese evento. Una verdadera vergüenza, teniendo además en cuenta que no se debía siquiera perder tiempo en eventos que gastan dinero en el desastroso estado del MINCIN. En fin, el mal”.
No es la primera vez que Toirac se burla de las instituciones cubanas, que incurren en un ridículo tras otro. También lo hizo sobre la llamada Tarea Ordenamiento, cuyo objetivo “no se ha logrado en su totalidad” tras un año de implementación en la isla.
“Me suena en el hipotálamo la canción de Pablo Milanés –incluso el sentimiento con el que la voz del trovador canta los versos ‘el tiempo pasa, nos vamos poniendo viejos…’– cuando leo que se van a aplicar ‘medidas para rectificar el ordenamiento monetario’ porque el objetivo del ordenamiento ‘no se ha logrado en su totalidad’”, escribió en Facebook el comediante Toirac.
Con ironía, el actor y guionista continuó desarrollando una escena que ilustra el fracaso de los planes económicos del régimen: “Me levanto, voy al baño, me pongo a orinar y me quedo mirando el azulejo que me queda a la altura de los ojos. Mi mente se pierde un tin. Raudas pasan todas las rectificaciones de errores y ‘ahora sí’, las leyes, las distintas etapas”.
“En el último año, la culminación de un estudio de diez (años) para implementar la tarea ordenamiento que en un año ha demostrado que de ordenar… Nada… incluso luego de implementarla, en marzo aproximadamente… una espectacular masa de especialistas y agrónomos y campesinos y jefes y… el copón y la vela con tronco de estudio para incentivar la producción… Y abastecer los mercados… Pasan casi las cuatro estaciones y el tomate vale más que Vivaldi con violín y tó”, concluía.