La escritora y activista Carolina Barrero, que había sido dada como desaparecida, y las también activistas Daniela Rojo y Camila Rodríguez, detenidas el lunes frente al Tribunal de Diez de Octubre, en La Habana, y conducidas a una estación de policía, fueron liberadas sin cargos este martes.
Tras el arresto de las jóvenes, en medio de la violencia y represión en contra de activistas y familiares de los detenidos por manifestarse en las jornadas del 11J que se encontraban frente al Tribunal, las redes sociales vibraron denunciando los hechos y clamando por la libertad de los detenidos.
“Las quieren acusar de incitadoras al desorden público, abrirles expedientes. Hoy se quedan en el calabozo. Dicen que son las únicas que no tenían familiares en el juicio”, denunció la periodista María Matienzo, quien mencionó el caso de Barrero como una “desaparición forzada”.
“En un inicio estaba en la 11na de San Miguel y pasada unas horas ya no estaba. No se sabe de su paradero. El Teniente Coronel Camilo lo aseguró a los amigos que esperaban fuera de la estación”, escribió la periodista.
El operativo policial incluyó patrullas, camiones, y autobuses con civiles pertenecientes a las llamadas Brigadas de Respuesta Rápida y agentes de la Seguridad del Estado, también se hicieron cortes e irregularidades en el servicio de internet por datos móviles tanto a personas que estaban frente al tribunal como en las zonas aledañas a la institución, denunció Justicia11.
“Los activistas y familiares se reunieron en el parque de Juan Delgado para orar y compartir denuncias. Al cierre del juicio, mientras salían los acusados y desde la distancia permitida por los agentes desplegados, haciendo uso de su derecho a la libertad de expresión gritaron “Libertad” y “Son unos héroes”. Esta manifestación pacífica fue respondida inmediatamente con represión. Varios testigos indican que muchas personas fueron golpeadas, incluyendo una anciana y una joven de 18 años. Hemos recibido testimonios de que los acusados, emocionados por el apoyo, se sumaron a la protesta golpeando el piso de camión en el que estaban siendo transportados de vuelta a la prisión y gritando “Libertad””, relató la agrupación.
Adrián Cruz (Tata Poet) describió en su cuenta de Facebook los detalles de la violenta detención de los participantes: “Él se abalanza a nosotros y le dobla fuertemente el brazo a Caro (Carolina Barrero). A mí me golpea en el estómago, y en las costillas, a ella se la llevan de manera muy, pero que muy violenta”.
La reconocida artista y activista Tania Bruguera abordó lo sucedido desde la perspectiva de la violencia de género e interpela a las organizaciones cubanas que, supuestamente, deben velar por la integridad de las mujeres.
También el Observatorio de Alas Tensas que se ocupa de investigar y denunciar la violencia contra las mujeres en Cuba, se hizo eco de la desaparición forzada de las detenidas
“Carolina Barrero está desaparecida”, gritan desde la isla y, desde su exilio en Noruega, el conocido influencer cubano Luis Demer se unió a la protesta virtual con un Live.
Salomé García Bacallao, curadora de arte y miembro del grupo Justicia11J clamó por la libertad de los detenidos desde Valencia, España.
“Nuevamente el abominable saldo de mujeres detenidas, Camila Rodríguez, Daniela Rojo, Carolina Barrero. Todas por asistir a los predios del Tribunal Municipal Popular de 10 de Octubre, donde esta ocurriendo la Causa de los 33,manifestantes del 11 de Julio”, denunció por su parte el artista cubano Hamlet Lavastida.
En horas de la tarde de este martes, Barrero fue liberada, informó en Facebook el actor y activista Daniel Triana, y confirmó la artivista a Radio Televisión Martí.
Más tarde liberaron también a Rodríguez, según informó en Facebook Salomé García Bacallao, quién esperaba la confirmación de la liberación de Rojo.
“Gente linda: Estoy bien. Ya me soltaron. El último interrogatorio con el DSE estuvo duro. Necesito descansar. Gracias a todos. Los llevo en mi corazón. Mañana les cuento con calma todo. Abrazo”, escribió sobre las 7 de la noche en Facebook Daniela Rojo.