Leuris Pupo Requejo es el «pistolero insignia cubano» por sus valores como ser humano, patriotismo, amor a la familia y por sus resultados internacionales. Parecería extraño que un hombre armado, con excelente puntería para descargar un arma, reúna tanta nobleza, pero es así.
Me enteré de que afirmó querer competir en siete u ocho Juegos Olímpicos, lo que sería igual a mantenerse activo, entre el tiempo de aprendizaje desde los ocho años de edad y de competencia, por cerca de 40 abriles, mes de su nacimiento.
A partir de Sydney 2000 hasta Tokio 2020, son seis ediciones en las que ha concursado con su pistola de tiro rápido a 25 metros de distancia. El oro en Londres 2012 y plata en la capital japonesa, lo distinguen entre otros éxitos.
-¿Qué te empuja, a tus 44 años, a desear competir en otros dos Juegos Olímpicos?
-El amor al tiro es lo que me inspira a plantearme ese objetivo. Toda mi vida la he dedicado a este deporte y quiero continuar mi carrera hasta que la edad me lo permita. Además, soy muy disciplinado, siempre con metas altas, que para realizarlas cuido la salud, durmiendo a la misma hora, haciendo todos los días la misma rutina y ejecutando ejercicios físicos para eliminar el estrés de las competencias.
-¿Puedes considerarte un Maestro del Deporte?
-La maestría deportiva la alcance hace años, ya que he logrado muchos altos resultados. Al terminar Tokio ocupaba el tercer lugar en el ranking mundial, con 3 500 puntos, detrás del francés Jean Quiquampoix (6 250) y el alemán Chritian Reitz (4 050), tiradores de probada calidad.
-En el mundo de la pistola de tiro rápido hay un pequeño grupo de rivales que dominan los podios. ¿Te sientes en desventaja por entrenar con falta de municiones y otros materiales por causa del bloqueo?
-Siempre he estado en desventaja por esa falta de municiones por causa del bloqueo, y en otras oportunidades el arma no ha sido la mejor. También por el estado de la instalación deportiva y el poco roce internacional, aunque nunca fui apoyado como para Tokio, con entrenamientos en España y la compra de implementos, que contribuyeron al éxito.
-¿A qué atribuyes haber ganado dos medallas olímpicas?
-Nunca me he dado por vencido, y en mi carrera he contado con buenos entrenadores que me han enseñado a emplear el máximo de mi potencial deportivo, Aunque muchos no lo crean, hay que fortalecer todos los músculos del cuerpo para soportar el peso de la pistola, para sostenerla durante unos minutos arriba, por eso la preparación física va a la par de la sicológica.
Pupo tiene la esencial para esta disciplina, el mundo puede estarse derrumbando a su lado durante una competencia, que a él no lo saca de concentración. Ni siquiera le perturba el: ¡Arriba las manos!