La organización internacional de derechos humanos Civil Rights Defenders denunció esta semana el ensañamiento de las autoridades cubanas con las personas que se manifestaron en La Güinera en las protestas de julio pasado.
Un total de 17 manifestantes de esta localidad del municipio habanero Arroyo Naranjo fueron condenados a penas de entre 15 y 25 años de prisión.
La organización con sede en Estocolmo, Suecia, considera que “las autoridades han atacado particularmente a los manifestantes del barrio marginal habanero”.
La entidad defensora de los derechos civiles y políticos toma nota de una observación de la periodista independiente cubana, María Matienzo, quien afirma que la severidad con los manifestantes de este barrio es una táctica deliberada del régimen para intimidar a los pobres y evitar que vuelvan a protestar: “El gobierno apunta a la gente de La Güinera porque la gente de allí tiene muy poco que perder y es probable que mañana se levante y vuelva a protestar. La dictadura necesita intensificar su represión para evitar que eso suceda”.
La periodista independiente denunció que la policía actuó allí con especial crueldad y que los manifestantes fueron detenidos temprano en la mañana por policías que ingresaban a sus casas con perros.
“Familias enteras fueron llevadas a prisión. Un ejemplo son los hermanos Mackyanis, Emiyoslán y Yosney Román Rodríguez, y su primo Orlanier Santiago. Aún no han sido llevados a juicio, pero el fiscal pide 25 años de cárcel para Mackyanis ”, dice María Matienzo.
La organización sueca analiza también la opinión de Darcy Barrero, periodista estadounidense y activista del grupo Justicia 11J que junto con Cubalex han documentado más de 1300 detenciones.
Barrero asegura que una de las razones de la dura represión en el barrio fue que las protestas tuvieron lugar el 12 de julio, el día después de las principales protestas nacionales, por lo que las fuerzas de seguridad estaban preparadas y tomaron medidas enérgicas ante cualquier indicio de levantamiento.
“En La Güinera, uno de los manifestantes incluso recibió un disparo en la espalda por parte de la policía y murió”, recuerda la organización en referencia a Diubis Laurencio Tejeda, quien murió de un disparo por la espalda propinado por el subteniente de la policía Yoennis Pelegrín Hernández, quien quedó libre de cargos al argumentar que actuó en defensa propia.
Una nota oficial del Ministerio del Interior de Cuba sobre los sucesos en esta localidad se refiere a los manifestantes como “grupos organizados de elementos antisociales y delincuenciales” que “alteraron el orden e intentaron dirigirse hacia la Estación de la Policía Nacional Revolucionaria del territorio, con el objetivo de agredir a sus efectivos y dañar la instalación”.
“Los manifestantes, a su paso, fueron interceptados por fuerzas del Ministerio del Interior y la población y en su intento por evadir la actuación, vandalizaron viviendas, incendiaron contenedores y afectaron el tendido eléctrico; al propio tiempo que agredieron con armas blancas, piedras y objetos contundentes a los agentes y civiles en el lugar. En el enfrentamiento, varios ciudadanos fueron detenidos, y otros resultaron lesionados, incluyendo agentes de la autoridad”, afirma la comunicación oficial publicada el 13 de julio.
Erik Jennische, Director del Departamento para América Latina de Civil Rights Defenders, se refirió al Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación de Cuba y la Unión Europea.
“Las sentencias de los manifestantes de La Güinera muestran claramente que a las autoridades cubanas no les importan las cláusulas de derechos humanos del Acuerdo con la Unión Europea. Ha llegado el momento de que la UE declare claramente que Cuba está violando el acuerdo y describa las consecuencias que esto tendrá para la cooperación entre la UE y Cuba ”, afirmó.
“Si Cuba puede seguir violando los derechos humanos de sus ciudadanos a esta escala sin que la UE actúe de manera decisiva, socavará la credibilidad internacional de la UE como promotora de los derechos humanos durante mucho tiempo”, alertó Jennische.
Civil Rights Defenders destaca que hasta el momento la UE aún no ha reaccionado a estas últimas sentencias de prisión.