Rosa María Payá solo dirá “misión cumplida” cuando se haga justicia por la muerte de su padre, pero está contenta porque la CIDH está cerca de pronunciarse sobre si fue víctima de un “asesinato de Estado”, informó la agencia de noticias EFE.
En una entrevista a pocas horas de la primera audiencia del “caso 9 416” ante la CIDH, Payá destacó que sería “muy importante” para las familias un reconocimiento y condena del organismo internacional por la responsabilidad del régimen cubano en los hechos en los que murieron su padre y Harold Cepero, oficialmente un “accidente” de tránsito.
Además de Rosa María, en la audiencia testificarán entre otros Ofelia Acevedo, viuda del MCL e ideólogo del Proyecto Varela, Amílcar Cepero, padre de Harold, y el político español Ángel Carromero, quien iba con los fallecidos.
El auto en el que viajaban Oswaldo Payá, Harold Cepero, el político sueco Jens Aron Moding y Carromero al volante, se salió de una carretera en la provincia de Granma, Cuba, e impactó contra un árbol, según la versión gubernamental rechazada por los familiares de los disidentes, quienes denunciaron entonces que en el incidente intervino un segundo vehículo por órdenes de la Seguridad del Estado.
Carromero, miembro del Partido Popular español, fue acusado de conducción temeraria con resultado de muerte y condenado a cuatro años de prisión en Cuba, aunque la mayor parte la cumplió en su país tras un acuerdo entre gobiernos.
“No iban a poner bombas como dijo el médico del hospital de Bayamo apodado el Nene, iban a llevar [el documento] El Camino del Pueblo al oriente cubano. Hoy Oswaldo y Harold estuvieran acompañando al pueblo de Cuba que pide libertad en las calles”, declaró a ADN Cuba, Michel Céspedes, representante del MCL en Costa Rica, propósito de cumplirse los nueve años de la pérdida.