El portavoz del Ministerio del Interior del gobierno interino talibán en Afganistán, Qari Sayed Khosti, confirmó este sábado el asesinato de cuatro mujeres en la ciudad de Mazar I Sharif, en el norte del país, e informó de la detención de dos sospechosos tras el hallazgo de los cadáveres.
“Los detenidos admitieron en el interrogatorio inicial que invitaron a las mujeres a la casa. Nuevas investigaciones se están llevando a cabo y el caso fue remitido al tribunal”, dijo Khosti en un video informativo en el que no identificó a las víctimas ni abordó las causas potenciales del crimen según las indagaciones preliminares.
Una fuente en Mazar I Sharif dijo a la AFP que al menos una de las cuatro víctimas era una activista de los derechos de las mujeres y que su familia no desea hablar con los medios.
Según fuentes de la sociedad civil citadas por BBC Persian, las mujeres asesinadas eran amigas y colegas que esperaban viajar al aeropuerto de la ciudad norteña para abandonar el país.
Un grupo de derechos humanos detalló bajo condición de anonimato que las mujeres recibieron una llamada en la que entendieron fueron invitadas para unirse a un vuelo de evacuación. Posteriormente fueron recogidas por un coche y luego fueron halladas muertas.
Los talibanes recuperaron el poder en Afganistán en agosto pasado y desde ese entonces mujeres y activistas de derechos humanos temen el retorno de las prohibiciones estrictas que caracterizaron la vida en la nación centroasiática durante el gobierno anterior de la agrupación islamista.
Con su interpretación radical de la sharía, los talibanes impedían que las mujeres participasen en la vida pública y sólo les permitían salir a las calles en compañía de un hombre.
Ante tales precedentes, muchas mujeres, periodistas y activistas de derechos humanos huyeron del país en las semanas inmediatas del retorno de los fundamentalistas al poder, pese a los anuncios de estos que sugieren menos radicalismo en las leyes que implementarán.