El tribunal de ensayo concedió el lauro a Fray Candil, la pluma del diablo de Martínez Carmenate, ‘por la novedad del tema escogido, una figura polémica de la intelectualidad cubana’ como Emilio Bobadilla (1862-1921), quien firmó artículos con ese mote.
Paneque, por su parte, conquistó la distinción con la novela Viendo arder la nieve, ‘por la manera que traduce a sus personajes en las relaciones familiares y con la sociedad, en un ambiente onírico y con dinámico empleo de los monólogos’.
En esta XIV edición del citado Premio compitieron 82 textos y estuvo dedicada al centenario de la poetisa local Digdora Alonso y a los 328 años de la ciudad de Matanzas, celebrados el pasado 12 de octubre.
También se entregó un reconocimiento honorífico a la poetisa Soleida Ríos y en la clausura actuó el Cuarteto D´Cámara, bajo la dirección de Vanesa Herrera, el cual interpretó piezas de Robert Schuman, Antonio Dvorak y Wolfgang Amadeus Mozart.
Entregaron los premios Osvel Marrero y Efraím Pérez, directores respectivos de Cultura y del Centro del Libro y la Literatura en la provincia de Matanzas, que junto a la filial de la Unión de Escritores y Artistas y Ediciones Matanzas auspiciaron el evento.
npg/wap