El gobierno de los Estados Unidos condenó este 16 de octubre la prohibición decretada por el régimen de Cuba contra la Marcha Cívica por el Cambio, prevista para el próximo 15 de noviembre en varias ciudades de la isla.
“El régimen cubano está violando sus derechos humanos y libertades al negar su capacidad para manifestarse de manera legal y pacífica”, afirmó en Twitter Edward “Ned” Price, portavoz del Departamento de Estado.
En un comunicado oficial del Departamento de Estado, Price añadió que su gobierno “condena enérgicamente la decisión del régimen cubano de denegar el permiso para que se celebren protestas pacíficas el 15 de noviembre”.
“Al negarse a permitir estas manifestaciones, el régimen cubano demuestra claramente que no está dispuesto a honrar o defender los derechos humanos y las libertades fundamentales de los cubanos”, consideró el funcionario.
Según Price, “la negación del régimen cubano se produce después de que anunciara su intención de colocar tropas en las calles cubanas del 18 al 20 de noviembre para intimidar a los cubanos y sofocar las protestas pacíficas previamente programadas en todo el país”.
“Estos últimos movimientos se suman a la respuesta represiva a las protestas del 11 de julio que presenciaron las personas en Cuba y en todo el mundo”, denunció el portavoz.