Cienfuegos, 12 sep (ACN) Durante los primeros 10 días del mes de septiembre la provincia de Cienfuegos mostró una tendencia a la disminución de casos positivos al SARS CoV-2 en edades pediátricas, luego de varias semanas como epicentro de la pandemia a causa de la contagiosa cepa Delta.
Mercedes Fonseca Hernández, asesora provincial para la COVID-19 en esas edades, declaró a la ACN que estas jornadas han estado marcadas por una menor cantidad de pequeños en las salas del hospital pediátrico Paquito González Cueto (HPU), porque en fecha reciente sobrepasaban los 120 niños hospitalizados y el sábado último solo tenían 64.
Añadió que por primera vez, desde la irrupción de la mencionada variante del coronavirus en Cienfuegos, tienen el cuerpo de guardia de la institución sanitaria descongestionado, sin un número elevado de infantes y familiares en espera para ser atendidos.
Destacó que, a partir del comportamiento de la enfermedad sintomática, en el HPU ―destinado a pacientes hasta un año, a aquellos con síntomas moderados o graves y con padecimientos crónicos― desocuparon dos salones grandes, con 22 camas cada uno.
Además, dijo, comenzarán a cerrar algunas locales que funcionaban como centros de aislamiento para menores infectados, por ejemplo, el círculo infantil Soldadito de la Revolución, así como las escuelas de Iniciación Deportiva, la Militar Camilo Cienfuegos y la de Arte Benny Moré.
Explicó que permanecerán como hospitales para positivos los hoteles Pasacaballos y Punta Las Cuevas, además del centro para la primera infancia Zapaticos Blancos, al frente de los cuales se encuentran personas altamente calificadas, provenientes de la atención primaria de Salud y del HPU.
Hasta la fecha, en el territorio cienfueguero solo estuvieron nueve infantes en la terapia intensiva, de ellos ocho graves, con evolución favorable, y una niña en estado crítico, quien lamentablemente falleció, apuntó la también especialista de Segundo Grado en Pediatría.
Refirió que, en este período de ardua lucha contra el nuevo coronavirus, sobre todo durante el pico de julio y agosto, no presentaron dificultades con medicamentos, pruebas complementarias ni oxígeno.
Fonseca Hernández agregó que retomaron las consultas para la atención a menores de 18 años, convalecientes de la COVID-19, los martes y jueves de cada semana.
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Enfatizó que estas sesiones estarán destinadas a los pequeños cuyos síntomas fueron moderados o que presenten alguna secuela asociada al SARS CoV-2.
Así, los niños serán atendidos por un equipo multidisciplinario, integrado por las especialidades de Pediatría, Neumología, Nutrición, Siquiatría, Sicología, Fisiatría y rehabilitación, Cardiología y Neurofisiología, entre otras.
Desde enero hasta la fecha más de nueve mil 400 pacientes en edades pediátricas resultaron positivos al virus en la provincia, con un incremento de los contagios en adolescentes y un aumento de las formas graves de la enfermedad en ese grupo etario.