El referido financiamiento se destinará a los cultivos de arroz, plátano, yuca, frutas y a las producciones porcinas y de la ganadería vacuna, según la información.
Las operaciones del fomento agropecuario regirán a partir del primero de septiembre, para lo cual ya está en marcha la selección de las entidades donde se ejecutarán.
Para la asignación de los montos aprobados los beneficiarios deberán cumplir los requisitos establecidos para cada actividad, entre ellos rendimientos por área, aplicación de la ciencia y la técnica, contar con sistemas de regadío, y tener como destino de sus cosechas a la industria, el consumo social y los mercados agropecuarios.
El crédito se otorga con una tasa de interés del 1,5 por ciento para capital de trabajo, con un plazo de devolución en correspondencia con el ciclo productivo del cultivo o actividad, y del dos por ciento para las inversiones, por lo que los ahorros financieros favorecerán a los destinatarios.
Para este respaldo monetario, aprobado por el Gobierno cubano, es importante la selección de los productores que podrán ser estatales, cooperativistas y usufructuarios, quienes serán asistidos con este crédito y cuya ejecución debe ser inmediata.
Esta y otras medidas, incluidas en un paquete de 106 acciones, tienen el objetivo de fortalecer al sector agropecuario y a la empresa estatal socialista para avanzar en mejores condiciones en la transformación de la agricultura cubana e incrementar la producción de alimentos.
Se trata de estrategias como la nueva política de comercialización de productos agropecuarios, que favorece no solo la siembra y cosecha, sino también la venta para satisfacer las demandas de la población con un abastecimiento permanente y de calidad.
Recientemente el ministro de la Agricultura Idael Pérez significó que todo se hace reconociendo los actuales costos a partir de las limitaciones económicas del país por el recrudecimiento del bloqueo económico impuesto por Estados Unidos, los efectos de la Covid-19 y el cambio climático, factores que afectan la compra de insumos para cultivar la tierra y los rendimientos.
Pérez insistió en que las políticas aprobadas y en ejecución son expresión de la voluntad política y gubernamental de facilitar la gestión de los recursos y precios, cubrir el mercado interno en divisas, impulsar las exportaciones, y mejorar las condiciones de trabajo y salariales en esos sectores.
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