Con solo 27 años de edad (2 de octubre de 1993) Lasha Talajadze cuando llegó a Tokio tenía por credencial la medalla de oro en los más de 105 kg del levantamiento de pesas, por lo que las tres doradas obtenidas ahora, son su reafirmación como el mejor del mundo.
En esta ocasión en los 109 kg estaba muy por delante de sus rivales, pero continuó para ver hasta dónde podía llevar su éxito, con un peso corporal de 176 kg y 1.97 metros de estatura.
El georgiano levantó 223 kg, plusmarca mundial en arranque. Luego, 265 kg en a dos tiempos, su segundo récord, que solo pudo propiciar un tercero: 488 kg en el total. Talakhadze no solo se llevó así el oro en la categoría +109 kg, sino que también se acerca a la mágica marca de 500 kg.
El iraní Ali Davoudi levantó 200 kg en arranque y 241 kg en a dos tiempo, con lo que el atleta de 22 años alcanzó un total de 441 kg para hacerse con la medalla de plata.
Man Asaad, de la República Árabe Siria, había ocupado el lugar 15 en Río 2016 y ahora se lleva el bronce con un total de 424 kg.