De la selección destacan Seducida y abandonada (Pietro Germi, 1964); Solo se vive una vez (Fritz Lang, 1937); Crónica de un amor (Michelangelo Antonioni, 1950), El hombre del carrito (Hiroshi Inagaki, 1958) y Fin de temporada (Zoltán Fabri, 1966).
Completan la muestra El círculo rojo (Jean-Pierre Melville, 1970), Serpico (Sidney Lumet, 1973), Claudine (John Berry, 1974); La joven (Souleymane Cissé, 1975), Pieza inconclusa para piano mecánico (Nikita Mijalkov, 1977), La venganza es mía (Shoei Imamura, 1979) y Buenos muchachos (Martin Scorsese, 1990).
Según explicó Castillo, La última cena logró su restauración mediante un acuerdo entre la Cinemateca de Cuba y el archivo de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Los Ángeles, Estados Unidos.
‘Esa copia definitiva de una obra maestra del cine iberoamericano —que tuvo su premier mundial en el festival de Venecia en 2019— está programada para el miércoles 18 de agosto’, adelantó.
Asimismo, citó las palabras del director del certamen y promotor de la muestra, Alberto Barbera, quien dijo que llevar estos títulos deviene una oportunidad excepcional para poner al público en contacto con la historia del cine mediante significativas obras que han marcado su evolución.
Del 14 de julio al 30 de agosto de 2020 sesionó la primera edición de Clásicos Fuera de Muestra del festival en los jardines de la Bienal de Venecia, que reunió a una gran cantidad de espectadores e ‘incidió en la resonancia de esta propuesta recibida cálidamente’, destacó el especialista.
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