La Guardia Costera instó a los navegantes recreativos del sur de la Florida que consideren transitar hacia las aguas territoriales cubanas a “NO tomar el mar”.
Es ilegal que los navegantes salgan de los Estados Unidos con la intención de transitar a Cuba para cualquier propósito sin un permiso, y las aguas que se encuentran en el Estrecho de la Florida son impredecibles y peligrosas.
Las embarcaciones y personas que ingresen ilegalmente a las aguas territoriales cubanas o se acoban o salgan de las aguas territoriales de los Estados Unidos con la intención de ingresar a las aguas territoriales de Cuba, sin el permiso requerido, pueden ser objeto de incautación de su embarcación, sanciones civiles y penales de hasta $25,000 por día, y 10 años de prisión.
La Guardia Costera añadió que las personas que violen las leyes de inmigración de los Estados Unidos y traigan ilegalmente a ciudadanos extranjeros al país, o que intenten hacerlo, pueden estar sujetas a arresto, confiscación de embarcaciones, multas civiles y penales de hasta $ 250,000 por día, y cinco años de prisión.
La Guardia Costera insta encarecidamente a los navegantes a no tomar los mares, ya que podría poner la vida de los navegantes en peligro, especialmente durante la temporada de huracanes. En los últimos meses, 20 migrantes cubanos de dos casos separados de búsqueda y rescate NO pudieron ser encontrados en el estrecho de la Florida después de que sus rústicas embarcaciones naufragaran.
Si un navegante intenta transitar cerca de las aguas territoriales cubanas, aquí se recomiendan consejos de seguridad para la navegación:
• Tener equipo de comunicación de trabajo, como un teléfono satelital y una relación de banda marina,
• Monitorear el VHF-FM Canal 16, ya que este es el canal de emergencia de la Guardia Costera,
• Tome una baliza de localización personal o una posición de emergencia que indique la radiobaliza,
• Presentar un plan de flotación,
• Tener chalecos salvavidas adecuados para todos a bordo del buque,
• Tome comida y agua adicionales,
• Monitorear de cerca el clima y el estado del mar a medida que las condiciones cambian rápidamente en el sur de la Florida.