A ellos los he visto soñar y trabajar sin descanso por buscar las fórmulas que salven a su pueblo, romperse la mente y el alma por el noble y humano empeño, batallar contra las carencias financieras y el criminal bloqueo que les niega equipos, reactivos, test y muchas otras cosas, esforzarse por lograr la efectividad del escalado productivo en medio de esas dificultades, organizar con meticulosidad y rigor los ensayos clínicos para que no quede la mínima duda del hecho científico.