La Conferencia de Obispos Católicos de Cuba invocó sobre los hogares cubanos la protección de la Sagrada Familia “que también sufrió miedo, destierro y falta de techo y de pan”.
En un mensaje a la familia cubana en este Día de los Padres, los prelados agradecen a Dios “por las madres y los padres que reúnen alrededor de una misma mesa a todos sus hijos, aunque tengan diferentes maneras de pensar”.
Igualmente dan gracias por las personas caritativas que auxilian al que necesita una medicina, a los ancianos que viven solos; al que “requiere ayuda para llevarle algo a su familiar preso o ingresado en el hospital”, al que desea atentar contra su vida y a los que caen “en la trampa del alcohol y las drogas”.
Los obispos católicos cubanos reconocen que en el país se han aprobado regulaciones que aspiran a proteger a la familia, como la ley de la maternidad de la trabajadora y los esfuerzos por reducir la mortalidad infantil y las garantías de escuela y atención médica para los niños, entre otras.
No obstante, aseguran, “las familias cubanas vienen sufriendo diversos embates: encontrar el alimento diario se ha hecho cada vez más difícil, se pierde un tiempo precioso en las colas, con grandes riesgos por el posible contagio con el Covid-19; escasean las medicinas necesarias, han aumentado en modo considerable los precios de los servicios básicos, y el salario sigue sin alcanzar para que tantos vivan con dignidad”.
“El desaliento y la incertidumbre respecto al futuro provocan el deseo de emigrar, sobre todo en los jóvenes, hipotecando el futuro de Cuba. Además, persisten entre nosotros una mentalidad antinatalista y el aumento del número de uniones afectivamente frágiles, divorcios y abortos”, apuntan.
La Iglesia cubana considera que la falta de viviendas para los matrimonios jóvenes y el crecimiento de la población penal son motivos de preocupación para las familias.
En su declaración, los dignatarios católicos expresan, además, alarma ante la Resolución 16/2021 del Ministerio de Educación que oficializaría la ideología de género en la enseñanza porque contiene el “Programa de Educación Integral en Sexualidad con enfoque de género y derechos sexuales y reproductivos en el Sistema Nacional de Educación”.
“Sería deseable un debate amplio y participativo, donde todos tuvieran la oportunidad de ser adecuadamente informados y manifestar sus opiniones al respecto”, dice el mensaje.
En ese sentido la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba pide que se reconsidere el contenido de la disposición “por no tener en cuenta suficientemente el derecho de los padres en la educación sexual de sus hijos, y también por las graves consecuencias en la formación de niños, adolescentes y jóvenes, al oficializar el avance de la ideología de género en el sector de la educación, tan sensible en la formación de la personalidad”.