Una pequeña casa unifamiliar se encuentra en medio de un enorme proyecto de construcción en Coral Gables, el cual se considera el más grande en la historia de la ciudad con un valor aproximado de 600 millones de dólares.
El propietario dice que su casa tiene un valor sentimental invaluable y que no la venderá, sin importar el ruido, los escombros o lo que le ofrezcan.
Se trata de Orlando Capote, quien dijo a CBS4 que su padre al llegar de Cuba trabajó muy duro para poder comprar la casa que finalmente adquirió en el 1989.
“La casa es mi alma. Entonces, ¿de qué sirve vender tu alma por todo el dinero del mundo? ”.
Su casa en medio de una zona de construcción y ahora está envuelta por el desarrollo comercial más mega en la historia de Coral Gables.
“Esta casa es como un disco duro. Mientras miro a mi alrededor, vivo en él y me muevo a través de él, revivo muchos recuerdos. Eso no lo pude encontrar en otra casa ”, dijo Capote.
Pasaba la mayor parte de su tiempo al aire libre con los árboles de mango.
En 2005 falleció su papá y en 2020 perdió a su madre, quien en innumerables ocasiones le dijo que no quería vender el tesoro de su familia.
“No quiero tirar los dados. No quiero apostar. Entonces, los recuerdos valen más ”, dijo Capote.
Durante los últimos 6 años, Capote ha rechazado más de 60 ofertas para vender a desarrolladores, agentes de bienes raíces o «flippers» que hicieron ofertas de hasta $ 900,000 por la casa de dos dormitorios, dos baños y 1,300 pies cuadrados.
Aunque se queja de algunas irregularidades de la ciudad durante el mega proyecto inmobiliario a su alrededor, Capote asegura que no irá a ninguna parte. El recuerdo de sus padres en la vivienda perdura, y es algo muy importante para él.
“No me siento solo en la casa. Quizás ellos lo estén», dijo al citado medio.