A pesar del bloqueo económico impuesto por el Gobierno de EE. UU., Cuba es el único país de América Latina que tiene cinco candidatos vacunales propios contra la COVID-19. Para saber cuál es la situación actual de cada uno de ellos y despejar algunas inquietudes de la población, Granma conversó con el doctor Eduardo Martínez Díaz, presidente del grupo empresarial BioCubaFarma.
–¿Cómo marchan las evaluaciones clínicas de los candidatos vacunales cubanos y cuándo se conocerán los resultados de su eficacia?
–Después de la primera fase de evaluación clínica de las cinco vacunas, decidimos avanzar a las fases II y III con los candidatos Abdala y la combinación Soberana 02-Soberana Plus. Los resultados de la fase II fueron muy positivos para ambos candidatos, desde el punto de vista de la seguridad y la respuesta inmunológica que inducen. En los dos casos, más del 90 % de los individuos vacunados desarrollaron anticuerpos neutralizantes.
«En la Fase III, además de seguir midiendo seguridad, se determina la eficacia, es decir, qué porcentaje de los sujetos inmunizados se protegen de la enfermedad COVID-19, en comparación con el grupo que recibe el placebo. Dicha información la vamos a conocer en los próximos días, pues ya estamos en la etapa de evaluación final.
«Una vez que tengamos esos datos, se presentará el informe al Centro para el Control Estatal de Medicamentos, Equipos y Dispositivos Médicos (Cecmed). Esperamos tener el Autorizo de Uso de Emergencia a finales de junio o a inicios de julio.
«En el caso de las evaluaciones clínicas en la población pediátrica, ya comenzó el estudio con el candidato vacunal Soberana 02 y en los próximos días podríamos tener la aprobación para iniciarlo también con el candidato vacunal Abdala. Confiamos en que los resultados sean positivos y nuestros niños de tres años en adelante puedan ser vacunados antes de finalizar 2021.
«Igualmente, Soberana Plus está siendo valorada en convalecientes, con el objetivo de incrementar los títulos de anticuerpos de estas personas y protegerlas de reinfecciones, sobre todo de las nuevas variantes del virus SARS-COV-2. Como parte de la estrategia concebida, también serán evaluados en convalecientes los candidatos Abdala y Mambisa.
«En cuanto a Soberana 01, se pretende continuar su estudio próximamente».
–¿Cómo marcha la producción industrial de nuestros candidatos vacunales?
–Se han fabricado más de 4 millones de dosis y seguimos produciendo. Se ha hecho en tiempo récord y con estrictas normas de calidad. Al principio dispusimos de mayor cantidad de dosis de Abdala, pero ahora trabajamos para estabilizar la producción de Soberana 02.
–¿Se mantiene el compromiso de vacunar a la población cubana en 2021?
–Cumpliremos ese compromiso. Tenemos que sortear muchos obstáculos para poder fabricar las vacunas y mantener un ritmo elevado de vacunación.
–¿Puede una persona vacunada infectarse con el virus y enfermarse?
–La respuesta es sí. En primer lugar, es importante conocer que las vacunas lo que hacen es inducir una respuesta inmunológica encaminada a poder neutralizar la acción del virus. «Después de completado el esquema de inmunización es cuando la persona alcanza los niveles óptimos de inmunidad que le propician protegerse. Por tanto, un individuo que no lo haya completado puede infectarse y contraer la enfermedad.
«Las vacunas no protegen al 100 % de las personas. Las empleadas hoy, que tienen un Autorizo de Uso de Emergencia, reportan una eficacia entre el 50 y el 95 %. Significa que siempre habrá personas que, aun vacunadas con las dosis requeridas, podrán contraer la enfermedad. De ahí la recomendación de que toda persona inmunizada o que haya empezado el ciclo, siga cumpliendo de manera estricta las medidas de protección.