La complejidad epidemiológica de la provincia sigue in crescendo: al cierre de la jornada anterior se han confirmado 75 personas positivas a la COVID-19, una de las cifras más altas reportadas en toda la pandemia.
Como si fuese posible en el punto en que estamos que pudiésemos empeorar aún más. Porque para evidenciar gravedades están la cotidianidad y los números: de los diagnosticados dos son importados y 73 son autóctonos, de estos últimos 60 son contactos de casos notificados con anterioridad y tan elevado como 13 no tienen una fuente de infección determinada.
Y el doctor Manuel Rivero Abella, director provincial de Salud, revelaba a su juicio las causas que han condicionado tan desfavorable escenario epidemiológico: el considerable número de confirmados que aún no declaran todos los contactos; las nuevas variantes del SARS-CoV-2 que están circulando, las cuales son mucho más virulentas y letales, y la movilidad.
En medio de tal panorama sigue siendo la capital provincial el epicentro de esta pandemia: en la jornada anterior se computan 36 enfermos, los cuales se dispersan por todas las áreas de salud.
Lo señalaba la doctora Agnie Fernández González, asesora del Programa de Infecciones Respiratorias Agudas y Tuberculosis, al informar la distribución de los pacientes: 14 corresponden al Policlínico Sur, uno de ellos sin fuente de infección precisada; 12 al Norte, dos sin nexo epidemiológico establecido; siete al Centro, de ellos dos sin fuente de contagio establecida; uno a los Olivos, que tampoco tiene fuente de infección determinada; otro a Banao y uno a Guasimal, este último importado.
En complicación, como ha venido siendo rutinario, le sucede Trinidad, donde se notifican 14 personas infectadas por el nuevo coronavirus —dos sin fuente de contagio identificada—, la mayoría de la cabecera municipal: 12, mientras que uno pertenece a Condado y otro a Caracusey.
Cabaiguán también continúa agravando su situación al computar al cierre de la jornada precedente nueve casos —uno de ellos sin nexo epidemiológico establecido—, de los cuales tres residen en Guayos.
Uno de los territorios que habitualmente se había mantenido al margen de la COVID-19 es Yaguajay; mas, la pandemia suele quebrar casi todas las reglas, pues ayer se reportan en ese municipio seis enfermos, la mayoría de la cabecera municipal —cinco— y uno de Meneses. Y de igual modo ha sucedido con Fomento, donde se diagnostican cinco nuevos contagios.
Por su parte, en Jatibonico se notifica un solo paciente que es otro de los casos importados que se informan hoy en la provincia.
Lo preocupante también resulta que entre los confirmados de hoy figuran dos niños menores de un año de edad, lo que reafirma una estadística no menos inquietante: en la última quincena se han incrementado los contagios en la edad pediátrica, tanto que la cifra de niños diagnosticados aquí supera los 40 en ese lapso.
La COVID-19 no discrimina edades, pues uno de los pacientes pediátricos de la provincia se halla reportado de grave: un niño de seis años de edad, del municipio de Cabaiguán, según da cuenta el parte del Ministerio de Salud Pública (Minsap).
Y si fuese preciso evidenciar las complejidades podría añadirse otro dato desfavorable: en la jornada, el doctor Francisco Durán García, director nacional de Epidemiología del Minsap, ha informado del fallecimiento de una paciente de 69 años de edad, residente en el municipio cabecera, con antecedentes de padecer hipertensión arterial, diabetes y miocardiopatía dilatada. Con tal deceso, la provincia acumula cinco personas fallecidas a causa del SARS-CoV-2 solo en lo que va de mes.
Además, de acuerdo con el parte oficial del Minsap se mantiene reportado en estado crítico estable un paciente de 86 años de edad, residente en la capital provincial.
Con el incremento de los casos la tasa de incidencia de la provincia ha tenido un efecto directamente proporcional: 142.18 por 100 000 habitantes en la última quincena, con los indicadores más altos en Sancti Spíritus con 274.70; Fomento, 179.55, y Trinidad, 139.80.
La provincia sigue viviendo uno de los episodios más tensos a causa de la pandemia y, por lo que vaticinan los expertos, las jornadas por venir podrían seguir poniéndonos los pelos de punta.