El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ofreció una rueda de prensa una vez finalizada la cumbre con el mandatario estadounidense, Joe Biden, que se celebró este miércoles en la Villa La Grange, en Ginebra (Suiza).
El regreso de los embajadores
Al principio de su rueda de prensa, Putin declaró que ambos líderes acordaron el regreso de los embajadores ruso y estadounidense en Washington y Moscú a sus respectivas embajadas. «Hemos solucionado este problema. Los embajadores van a regresar a su lugar de trabajo mañana o pasado mañana. Ese es un asunto técnico», afirmó Putin.
Asimismo, el presidente ruso señaló que tras el encuentro el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia y el Departamento de Estado de EE.UU. «iniciarán consultas sobre toda la agenda de interacción diplomática». «Hay muchos asuntos pendientes», indicó Putin y sostuvo que «ambas partes […] estamos dispuestas a encontrar soluciones».
Ciberseguridad
Como se anunció antes de la reunión, los presidentes discutieron sobre la ciberseguridad. El mandatario ruso señaló que ambos países acordaron empezar consultas en ese ámbito. «Estamos iniciando las consultas sobre este asunto. En mi opinión, esta cuestión es de importancia integral».
En este sentido el presidente de Rusia hizo hincapié en la necesidad de «descartar todo tipo de insinuaciones, sentarse a nivel de expertos y empezar a trabajar para los intereses de EE.UU. y la Federación de Rusia, […] nosotros estamos de acuerdo en eso, en principio, y Rusia está preparada para esto», informó.
Refiriéndose a unas fuentes estadounidenses, Putin dijo que la mayoría de los ataques cibernéticos proceden del territorio de EE.UU., seguido por Canadá y dos países latinoamericanos.
Estabilidad estratégica
Uno de los temas discutidos fue la estabilidad estratégica y Putin declaró que ambos mandatarios acordaron iniciar un diálogo integrado bilateral sobre este asunto para crear un fundamento para el futuro control de armamentos y medidas para rebajar riesgos.
Relaciones entre Rusia y EE.UU.
Moscú debe ser «cautelosa» sobre el apoyo de Washington a ciertas organizaciones políticas en Rusia, pues el propio EE.UU. declaró en su día al país euroasiático como su adversario, afirmó Putin.
Putin recordó que, en 2017, el Congreso de EE.UU. declaró a Moscú su «enemigo y rival», e introdujo en su legislación disposiciones sobre la necesidad de apoyar procesos democráticos y organizaciones políticas en Rusia.
El caso Navalny
Comentando el caso de Alexéi Navalny, Putin afirmó que el opositor «sabía que violaba la ley vigente en Rusia», detallando que Navalny debía presentarse periódicamente ante las autoridades, siendo una persona condenada dos veces a prisión condicional.
El presidente ruso dijo que el opositor «ignoró a sabiendas este requisito legal», salió al extranjero para su tratamiento y las autoridades no pedían que volviera obligatoriamente. Al abandonar el hospital, Navalny publicó materiales de su trabajo de investigaciones y entonces las fuerzas del orden exigieron su regreso, pero no volvió, y se inició su búsqueda. Cuando regresó a Rusia, fue arrestado. En ese contexto, Putin afirmó que Navalny quería ser arrestado. «Él hizo lo que quiso», destacó.
Situación en Ucrania
Indicó que abordaron también el tema de la situación en Ucrania y Biden está de acuerdo con que la solución del conflicto en Donbass debe basarse en los acuerdos de Minsk.
Evaluación de la cumbre
Describiendo el transcurso de la reunión en Ginebra, Putin declaró que «no hubo ninguna hostilidad». «Por el contrario, nuestro encuentro se desarrolló con principios. Por supuesto, tenemos diferencias en muchas opiniones, pero, de todos modos, en ambas partes se demostró el deseo de entenderse y de encontrar formas de convergencia de posiciones», afirmó.
«La conversación fue muy constructiva», subrayó.
Previamente se anunció que tras la reunión Putin y Biden celebrarían ruedas de prensa por separado, en lugar de comparecer juntos ante los periodistas. El presidente ruso fue el primero en contestar a las preguntas sobre los resultados de la cumbre, que duró más de cinco horas.
Días antes de su reunión con Biden, Putin concedió una entrevista exclusiva a la cadena estadounidense NBC, durante la cual calificó a su homólogo norteamericano de un político de carrera y señaló que el mandatario estadounidense tiene «algunas ventajas y algunas desventajas», si bien agregó que puede trabajar con él.
Biden, por su parte, declaró a principios de esta semana que Putin «es brillante, es duro y […] es, como dicen, […] un adversario digno».
La cumbre que se celebró este miércoles en Ginebra tuvo lugar en medio de la escalada de tensiones entre EE.UU. y Rusia, que en los meses pasados se tradujo en la expulsión de diplomáticos y sanciones mutuas. Previamente, Putin aseveró que las relaciones entre Moscú y Washington «se han deteriorado hasta su punto más bajo de los últimos años».