Agentes de la Seguridad del Estado cubana ordenaron responder de forma violenta contra el periodista independiente Vladimir Turró Páez, en caso de que el comunicador se aproxime a la zona de vacunación contra el COVID-19 de su vecindario, en Arroyo Naranjo, La Habana.
Turro Páez, quien es colaborador de la publicación CubaNet, explicó a Radio Martí que supo de la orden por un vecino que se encontraba en el consultorio médico del barrio cuando los agentes instruían a varias personas allí, a los que llaman combatientes, “militares retirados que hacen guardia en el consultorio durante este tiempo de vacunación”, que si veían al periodista en las cercanías del lugar “estaban autorizados a lincharme”.
En un post publicado en Facebook, Turró Paéz encaró a sus represores:
“Comunistas, esbirros, asesinos, delincuentes, ustedes lo que me dan es risa, porque con tantas golpizas que he recibido de manos de sus lacayos durante estos 21 años de intensa lucha, nunca han podido doblegarme. Pero aquí los espero, con cámara en mano y con mi derecho a libertad de expresión esas son mis únicas armas contra la dictadura, ¿a eso le temen?”
Según explicó el comunicador a Radio Martí, quien permaneció ingresado con COVID-19 en mayo pasado, ha hecho varios programas sobre el tema y lo que sucede en los centros de aislamiento.
El gobierno, a través de su red de medios de prensa estatales, mantiene el control de la información sobre la pandemia. Los intentos de periodistas independientes, influencers y otros miembros de la sociedad civil de comunicar la realidad que enfrentan los cubanos en medio del repunte de contagios de la enfermedad, son censurados y reprimidos con multas y hasta encarcelamiento.
(Con reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)
