Nuevas evidencias sobre el financiamiento que reciben contrarrevolucionarios en Cuba y sus vínculos con instituciones sufragadas desde Estados Unidos, mostró el principal noticiario televisivo de la nación caribeña.
El informativo reveló las conexiones entre Tania Bruguera, artista relacionada con acciones subversivas en la isla; el político e historiador Armando Chaguaceda, y el Programa Cuba de la Universidad Sergio Arboleda, de Colombia, realizado con dinero de la Fundación Nacional para la Democracia (NED, por sus siglas en inglés).
De acuerdo con el reporte, la institución colombiana obtuvo más de 192 mil dólares de la NED para desarrollar su proyecto en 2018 y 2019, con el supuesto propósito de analizar y entender los procesos políticos, económicos, sociales y culturales en la isla antillana y su impacto en América Latina.
Sin embargo, bajo esa sombrilla y con Chaguaceda como uno de sus coordinadores, ha brindado apoyo financiero a iniciativas como InstAr, de Bruguera, que promueve acciones de desobediencia civil y trata de fomentar la subversión y el caos en el país caribeño.
Según un documento denominado Presupuesto Programa Cuba, publicado en el sitio web Razones de Cuba, InstAr obtuvo más de 26 mil euros para ejecutar una serie de transmisiones en directo que brindarían herramientas para incidir en la realidad antillana desde el arte y el civismo.
En palabras de la propia Bruguera, el espacio es para dialogar con los cubanos y buscar maneras eficaces de cambiar la realidad, no obstante, las personas invitadas tienen un amplio historial contra el gobierno y la sociedad de la isla.
Entre ellos se encuentran Carlos Alberto Montaner, vinculado a acciones terroristas en Cuba en los años 60 del siglo pasado y quien apoyó el bandidaje en el Escambray; y Martha Beatriz Roque, detenida en varias ocasiones por sus actividades contrarrevolucionarias y quien ha manifestado su apoyo a una invasión.
También estuvo Laritza Diversent, de origen cubano y residente en Estados Unidos, que al frente del proyecto Cubalex y con financiamiento del Gobierno de la nación norteña a través de la NED (249 mil 945 dólares en 2018 y 2019), brinda asesoría legal a activistas contra el orden socioeconómico cubano.
El reporte televisivo acotó que Chaguaceda, que mantiene contacto con integrantes del grupo mercenario de San Isidro y del mal llamado Movimiento 27N, escribió mensajes a Bruguera para brindarle apoyo a este último y conectarla a ella con figuras con un aval en el fomento de actividades subversivas.
Tal es el caso de Iria Puyosa, relacionada con acciones contra Venezuela y ‘experta en movimientos sociales, comunicación política y redes sociales’; e Inés Pousadela, representante de Civicus, institución que igualmente desarrolla acciones desestabilizadoras.
