Desde el 28 de abril, Colombia ha sido el escenario de protestas masivas contra el Gobierno, marcadas por la violencia policial. Según fuentes locales, decenas de personas fueron asesinadas, gran parte de ellas a manos de la fuerza pública. La mayoría de los homicidios fueron cometidos en Cali, la tercera ciudad del país, la noche del 3 de mayo particularmente.