Tras haber consumido cerca de dos litros diarios de una bebida energizante, un joven de 21 años debió ser hospitalizado en una unidad de cuidados intensivos en Londres, con un diagnóstico de insuficiencia cardíaca grave. “Este caso destaca aún más los peligros cardiovasculares potenciales de las bebidas energéticas en personas susceptibles”.
El arte de los nombres ridículos
Cada vez escucho más frecuentemente la frase: «En este sistema no funciona nada. Nada sirve». La gente es muy exagerada, porque si solamente se sentaran