Pocos imaginan que este prometedor atleta, integrante del equipo campeón de Cuba (Alazanes de Granma), casi decide dejar la pelota, deporte que practica desde los seis años. Hoy sueña con jugar contratado en el exterior, integrar el equipo Cuba grande y participar en un Clásico Mundial. También desea volver a ganar con Granma en la serie nacional.