“Las nuevas variantes de COVID-19 son preocupantes, especialmente la sudafricana, porque el virus se transmite más velozmente y los sistemas de salud podrían tener más dificultades. Pero sobre todo porque los informes preliminares muestran que con la mutación sudafricana existe el riesgo de reinfección”, afirmó el director de Organización Mundial de la Salud (OMS) Europa, Hans Kluge.