Un nuevo enfrentamiento se produjo entre las fuerzas de seguridad guatemaltecas y la caravana de migrantes hondureños, en el que la Policía volvió a emplear todo su arsenal represivo. Horas antes, figuras de las fuerzas del orden dialogaron con los migrantes, buscando que estos se retiraran y, ante su negativa, se dio orden de desalojarlos.