Los datos proporcionados por la organización Gun Violence Archive informan que tan solo en los primeros cuatro días del año 2022 murieron 400 personas a causa de la violencia con armas, y otros 282 estadounidenses resultaron heridos.
De acuerdo con HispanTV, el país estadounidense ha sido testigo de nueve tiroteos masivos, numerosos homicidios y suicidios, así como asesinatos desde inicios de año.
La violencia armada en Estados Unidos ha sido un problema social crónico que parece no tener solución. El Buró Federal de Investigaciones (FBI, por su sigla en inglés) estimó que se vendió un número récord de 17 millones de armas desde enero de 2021 hasta noviembre de 2021.
El año pasado también fue complejo; según estadísticas publicadas por el departamento de Policía de Chicago, el 2021 terminó con 797 homicidios, 25 más de los que se registraron en 2020, 299 más que lo sucedido en 2019, y la mayor cantidad desde 1996.
Además, hubo 3 561 incidentes de disparos en 2021, lo cual tuvo un leve aumento (unos 300) en comparación con los registrados en 2020 y 1 415 más que lo ocurrido en 2019. De hecho, un incremento en el número de tiroteos causó el crecimiento del número de bajas, como nunca antes visto en los últimos 25 años.