La resolución lituana, presentada por el diputado Emanuelis Zingeris (figura histórica pues firmó la declaración de independencia y desciende de sobrevivientes del Holocausto), expresa que “la libertad y la democracia de Lituania nacieron de nuestra prolongada, dolorosa, pero al final exitosa, lucha contra los males del totalitarismo, tanto en sus versiones nazi como comunista”.
Por eso, condenan al “Gobierno cubano [que] es un aliado cercano de Rusia y juntos siguen siendo pilares clave para sostener al Gobierno criminal de Venezuela y su coalición de actores estatales y no estatales dedicados a las actividades ilícitas y la subversión de la democracia en el hemisferio occidental”.
Acuerdo UE-Cuba en la picota
El parlamento unicameral lituano rechazó el Acuerdo de Diálogo Político de la Unión Europea con Cuba, una decisión que pondría en peligro la colaboración entre el bloque hemisférico y la isla, aseguran expertos.
“El Acuerdo está en jaque. Si Lituania hace caso a su Parlamento y dice en una simple carta a la UE que no piensa ratificarlo, desde ese momento la única opción para Josep Borrell es romperlo ipso-facto”, declaró a ADN Cuba Javier Larrondo, presidente de la ONG Prisoners Defenders.
Esta decisión estaría amparada en el artículo 25 de la Convención de Viena, donde se indica que, si un Estado comunica el deseo de no ratificar un acuerdo, este deja de estar vigente de inmediato.
El texto aprobado el miércoles por Asamblea Nacional de ese país con costas al Mar Báltico justificó su decisión diciendo que no se deben alentar las violaciones a los derechos humanos y el comportamiento opresivo del gobierno cubano.
En el mismo, los legisladores lituanos se solidarizan con las víctimas de la represión que exigen derechos políticos, civiles, económicos y culturales. Mencionan específicamente a Maykel Osorbo, Luis Manuel Otero Alcántara, Denis Solís, Luis Robles y los detenidos en la protesta de la calle Obispo, entre otros.
El Seimas lituano recuerda que el régimen de La Habana fue instado “repetidamente” y “en vano” a cesar sus políticas represivas, pues “los líderes de la Unión Europea, Estados Unidos y América Latina, así como tres papas que visitaron la isla y líderes del sector privado del mundo libre, le brindaron una mano amiga”.
Además, calificó de “insulto” la actitud de las democracias que “en el pasado extendieron al Gobierno cubano el beneficio de la duda”, la “ola frenética de brutal represión” que se vive en los últimos meses en la isla.